Ni yogur ni kéfir: el alimento cargado de probióticos para evitar la hinchazón y la acidez en verano

Los alimentos ricos en probióticos se han convertido en un elemento esencial en la lista de la compra de aquellos que sufren de molestias digestivas, como la hinchazón abdominal o la acidez. Estos problemas intestinales son más frecuentes en verano, ya que son unas fechas en las que incrementan los viajes y los planes que incluyen comidas y cenas fuera de casa, por lo que cuidamos menos la alimentación.

Por eso, los probióticos, que contienen un alto poder antiinflamatorio, son un gran aliado. Estos microorganismos vivos presentes en alimentos fermentados contribuyen a equilibrar la flora intestinal, refuerzan el sistema inmunológico y ayudan a mejorar la digestión. Algunos de los alimentos más conocidos y beneficiosos, como el yogur, el kéfir o la kombucha, cada vez ocupan más espacio en los lineales de los supermercados.

Otro de los productos que han adquirido popularidad en los últimos años es el tempeh. Está elaborado a partir de soja fermentada, lo que lo convierte en una alternativa vegetal de alto contenido proteico. Además, durante el proceso de fermentación se genera vitamina B12, un elemento escaso en la mayoría de alimentos de origen vegetal.

Según la Academia Española de Nutrición y Dietética, en comparación con el tofu, el tempeh tiene un mayor contenido en proteínas, fibra y minerales. La manera más habitual de cocinarlo es a la plancha o salteado. También se puede marinar previamente con aceite de oliva, soja y especias. Su textura compacta permite cortarlo fácilmente e incorporarlo en ensaladas, salteados, guisos o sopas. Un estudio publicado en la National Library of Medicine, indica que los aperitivos elaborados con soja y con alto contenido proteico favorecen el control del apetito y aumentan la sensación de saciedad.

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