La alusión a los «presos políticos» de ETA enfrenta en el Parlamento vasco al PNV y PP

Todos menos EH Bildu estaban de acuerdo, pero PNV, PSE, PP y UPyD han sido incapaces de cerrar un acuerdo global y el Parlamento no ha rechazado que a los presos de ETA se les llame «políticos». No es un debate nuevo. Más bien al contrario. La Cámara ya dejó claro hace tiempo que no lo son con una amplia mayoría, pero hoy ha sido imposible votar lo mismo.

El debate ha vuelto al Parlamento vasco a raíz de una iniciativa del PP. Los populares querían insistir en ello después de la visita que realizó Arnaldo Otegi al Parlamento europeo en abril.

El secretario general de Sortu dijo entonces que los internos de la banda son «políticos» y que los fugados de la acción de la Justicia son «refugiados». Unas palabras que para el popular Carmelo Barrio son un «insulto» para las víctimas. El PP ha pedido que el Parlamento las rechazase de pleno, una petición a la que se ha sumado con una dura intervención Gorka Maneiro (UPyD).

En el rechazo a definir a los presos etarras como «políticos» también han coincidido el PNV y el PSE. Pero, aun así, han sido incapaces de fijar una postura común.

El problema ha surgido cuando socialistas y sobre todo los jeltzales han acusado al PP y a UPyD de hacer una utilización partidista de la cuestión. Aunque las cuatro formaciones han coincidido en sus discursos en que no se debe llamar «presos políticos» a los etarras, ha sido imposible fijar un consenso de mínimos entre duras descalificaciones.

El PP y UPyD han centrado sus críticas en el PNV, unos ataques que han sido rebatidos por Iñigo Iturrate. El parlamentario jeltzale ha insistido en que es una cuestión que ya había sido aclarada por el Parlamento y ha venido a decir que no quería hacerle el juego a Carmelo Barrio. La enmienda jeltzale apostaba por «dejar de referirse a las personas fugadas vinculadas a ETA con calificativos que resulten ofensivos para las víctimas». El PSE, por su parte, ha sostenido que la moción popular era darle protagonismo a Otegi.

El único grupo que ha evitado quitar a los presos de ETA el calificativo de «políticos» ha sido EH Bildu. Pello Urizar ha pedido respeto para «todas las víctimas» y ha recordado que él siempre ha estado en contra de las acciones de ETA.

A pesar de que la coalición soberanista ha sido la única que se ha desmarcado del fondo de la cuestión, el resto de grupos no han sido capaces de pactar un texto conjunto y todas las enmiendas han caído.