La división en el Gobierno vasco deja en el aire los descuentos en el transporte

La portavoz del Ejecutivo autonómico, María Ubarretxena, dijo este martes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que la prórroga de los descuentos se va a aprobar «tal y como estaba planteada, pero con el aval jurídico correspondiente». Eso significa, en teoría, que en enero los usuarios vizcaínos pasarían a disfrutar de una bonificación del 50%, lo que incluso mejoraría el incentivo actual, que es del 40%. Es lo que planteó Etxanobe.

Poco después, fuentes del Departamento de Movilidad Sostenible del Gobierno vasco, en manos del PSE, pusieron en duda lo anunciado por Ubarretxena. «Consideramos que ha mostrado mucho optimismo», señalaron. «Si la Diputación quiere prolongar las ayudas, puede hacerlo con su financiación propia, pero el Gobierno vasco defiende la seguridad jurídica y la igualdad en todas las ayudas públicas a toda la ciudadanía de Euskadi, sin generar desigualdades en el ámbito del transporte público». En estos momentos, la Diputación y el ejecutivo autonómico financian la mitad del descuento; la otra mitad corresponde al Gobierno central.

Fuentes del ala jeltzale del Ejecutivo consultadas por este periódico matizaron, frente a la contundencia de lo dicho por Ubarretxena, que los diferentes departamentos implicados analizan la forma de garantizar que la medida cuente con las debidas garantías jurídicas. Pero no se atrevieron a fijar un horizonte temporal para que los descuentos se prorroguen.

De fondo se sitúa un pulso entre PSE y PNV, pero también otro dentro del socio mayoritario. Mientras la Diputación de Bizkaia tiene claro que quiere mantener los descuentos, los representantes del Departamento de Hacienda del Gobierno vasco, del PNV, ven «falta de seguridad jurídica». Su argumento es que los incentivos actuales están amparados por un real decreto que finaliza el 31 de diciembre. Como el Gobierno central aún no ha desvelado si mantendrá su parte de la bonificación, el área que lidera Noël d'Anjou ve arriesgado adelantarse.

Esta división se reveló en toda su crudeza la pasada semana en el Consorcio de Transportes de Bizkaia (CTB), un órgano mancomunado en el que el PNV tiene mayoría. Los representantes de Hacienda se ausentaron de la reunión en la que Etxanobe tenía previsto aprobar la prórroga, lo que otorgó la mayoría al PSE, que, como Hacienda, rechaza prorrogar los descuentos hasta que Madrid no mueva ficha. La diputada general sufrió así un duro varapalo que provocó un profundo malestar en el palacio foral.

Fuentes del área que dirige d'Anjou explican a este periódico que ahora sí se abren a prorrogar los incentivos. «Seguimos trabajando para que la seguridad jurídica sea completa y lograr así una solución. Confiamos que sea antes del 31 de diciembre», abundan.

Frente a las dudas de Hacienda y del PSE, el equipo de Etxanobe asegura que su planteamiento goza del visto bueno de la secretaria y del interventor del CTB, funcionarios independientes encargados de velar por la legalidad de las decisiones adoptadas.

El problema para resolver este galimatías son los plazos. El CTB cuenta con unos estatutos de los años 70, que obligan a tener en exposición pública durante 30 días una medida de este calado. Por eso Etxanobe quiso aprobarla en la reunión de la semana pasada, para que la bonificación entre en vigor el 1 de enero. Por el momento no hay convocada una nueva reunión de este organismo, mientras el tiempo corre.