Gobierno vasco y Diputación dejan para 2026 la decisión final sobre el Guggenheim de Urdaibai
Encomiendan a un centro de estudios y a una universidad de EE UU un proceso de escucha en la comarca cuyo resultado no será vinculante
El Gobierno vasco y la Diputación van a darse más tiempo para decidir si siguen adelante con el Guggenheim de Urdaibai. Aunque se preveía que ... el anuncio definitivo se realizara este año, no será al menos hasta 2026 cuando se aclare todo. Pese a que la hoja de ruta se mantiene invariable y las instituciones siguen adelante con las labores medioambientales y administrativas previas, han encomendado a la Fundación Agirre Lehendakaria Center y a la Universidad neoyorquina de Columbia que lleven a cabo un proceso de escucha en una comarca en la que la contestación social al proyecto es muy considerable. El estudio sociológico arrancará la semana que viene y se prolongará hasta bien entrado el próximo ejercicio.
La consulta a la ciudadanía se realizará a través de una serie de encuestas -un millar como mínimo- a vecinos «anónimos» y a colectivos vecinales y sociales representativos de Urdaibai y Busturialdea. La información obtenida será «analizada» e «interpretada» antes de ser contrastada nuevamente en la zona para acabar alumbrando una «batería de sugerencias concretas» que serán entregadas a las instituciones. Los informes, en todo caso, no serán vinculantes sino una más de las cuestiones que el Gobierno vasco y la Diputación tendrán sobre la mesa cuando toque decidir si el nuevo museo es viable o no.
«Escuchar no significa parar el proceso, es compatible con seguir descontaminando y renaturalizando las zonas»
«Es un debate social complejo en el que se entremezclan percepciones positivas y negativas del proyecto»
Elixabete Etxanobe
Diputada general
«El proceso participativo no busca convencer a nadie ni obtener un 'sí' o un 'no' respecto al proyecto, solo sumar más información para tomar la mejor decisión», defendió ayer la vicelehendakari primera y consejera de Cultura y Políticas Lingüísticas, Ibone Bengoetxea, durante el acto de presentación del estudio que llevó a cabo en Gernika junto a la diputada general de Bizkaia. «Estamos ante un proyecto complejo en el que se entremezclan percepciones positivas y negativas y hay que intentar dar respuesta a todo eso», añadió Elixabete Etxanobe.
Hace justo un año el Patronato del Guggenheim Bilbao dio a conocer a través de su entonces presidente, el lehendakari Urkullu, que había abierto un periodo de reflexión sobre la ampliación del museo con dos nuevas sedes en la Reserva de la Biosfera. Concretamente, en Gernika y Murueta. Se consideraba que el proyecto estaba 'verde' para decantarse y el malestar en la comarca crecía, así que se optó por tomarse dos años de impás. En este tiempo la Diputación sigue descontaminando y renaturalizando una de las parcelas que podría albergar la pinacoteca -la de la antigua cubertera Dalia-, negocia la compra de la segunda con Astilleros Murueta y tiene en marcha una ingente batería de trámites urbanísticos, de cuya resolución también depende el futuro de la operación. En este tiempo se continúa «con todo lo que no suponen actuaciones irreversibles», confirmó la diputada general.
«Cautela»
El Ejecutivo vizcaíno viene modulando su discurso sobre el proyecto de un tiempo a esta parte. Sigue siendo la institución que lidera el proceso y está convencida de las virtudes de construir el museo, pero ya no da por segura la ejecución. El pasado octubre miles de personas se manifestaron en Gernika contra un proyecto que no consideran que vaya a traer «nada positivo» a la zona y al que le ven importantes afecciones ambientales. La Diputación asegura justo lo contrario: que, aparte de arte, el museo busca integrarse en el entorno, poner en valor y respetar la Reserva de la Biosfera, recuperar zonas degradadas, ayudar a estimular la economía local... A los pocos días de aquella concentración ciudadana en Gernika el pleno del Parlamento vasco instó a las instituciones a que no impusieran el proyecto a las bravas y que escucharan las quejas. Para eso servirá el proceso ahora. La plataforma 'Guggenheim Urdaibai Stop', creada para canalizar la oposición a la pinacoteca, expresó ayer su «cautela» respecto a la consulta pero anunció su disposición a participar. De hecho, sus representantes ya mantuvieron un primer encuentro con portavoces del Agirre Center anteayer.
«No será un proceso para cubrir el expediente, es fruto de una voluntad sincera y profunda de escuchar»
«El objetivo no es convencer a nadie ni obtener como resultado un 'sí' o un 'no'»
Ibone Bengoetxea
Vicelehendakari primera y consejera de Cultura
Con el aval de Nueva York
Serán una decena las personas que van a trabajar sobre el terreno y en el análisis de los datos que se recojan con las encuestas. Agirre Center es un centro de investigación social creado hace doce años por el lehendakari Ibarretxe. «No será un proceso de escucha para cubrir el expediente, es un proceso neutral que responde a una voluntad sincera de escuchar y comprender a la ciudadanía», defendió Bengoetxea. El estudio busca, entre otras cosas, «diferenciar discursos públicos» y «narrativas ocultas». Dicho de otro modo: comprobar si el importante rechazo que se percibe en Urdaibai y Busturialdea es así de potente cuando se pregunta a la gente por separado y en privado.
El proceso que se inicia en apenas unos días cuenta con el aval de la Fundación Guggenheim de Nueva York. Ganar tiempo también va a ayudar a que todas las partes engrasen la maquinaria porque, si en Estados Unidos la nueva CEO de la entidad, Mariët Westermann, lleva poco más de un año en el cargo, en Bilbao el traspaso de poderes está justo ahora en su punto álgido. Miren Arzalluz toma posesión oficialmente el 1 de abril como nueva directora del museo en sustitución de Juan Ignacio Vidarte.
En paralelo el Gobierno vasco y la Diputación tienen en marcha otro mecanismo de escucha en la comarca, el vinculado a un plan de revitalización que va a ponerse en marcha durante los próximos años. Entre las cuestiones que se debatieron en una serie de mesas redondas que se celebraron en diciembre también apareció la posibilidad de que un proyecto cultural ayude a dar más vida a una zona en franco declive demográfico y socioeconómico.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión