Las 10 señales de que tienes que cambiar de móvil
La batería o la pantalla son los componentes más definitorios
sara borondo
Lunes, 18 de julio 2022, 00:22
No hay una norma fija para saber cuándo hay que cambiar de teléfono. Para algunas personas es cuando sale el modelo siguiente, para otras cuando surge una tecnología que les interesa (como el 5G o los teléfonos plegables), mientras que hay quien intenta sacar todo el rendimiento posible a cada móvil antes de adquirir uno nuevo.
Según el informe 'Cierra el Círculo', elaborado por la web de segunda mano Milanuncios, 6 de cada 10 españoles no utiliza el smartphone hasta el fin de su vida útil. Además, según un estudio de IOSondea realizado hace dos años, la mayoría de los usuarios (el 44,41%) espera entre tres y cuatro años para cambiar el teléfono y el 34,11% lo hace entre el primer y el segundo año.
¿Cuándo saber que ha llegado ese momento? Estos son algunos de los signos que indican que va siendo hora de elegir un dispositivo nuevo:
1. La pantalla parpadea o muestra líneas verticales: Es un síntoma de envejecimiento que indica que la pantalla se ha degradado con el uso, aunque también puede indicar que se ha dañado alguna conexión de un cable en alguna caída o golpe.
2. La pantalla pierde sensibilidad táctil: Los sensores no detectan igual nuestros toques, hay que insistir más o hay zonas de la pantalla donde hay que pulsar con más intensidad. No suele resultar rentable cambiarla por otra nueva, sobre todo cuando el resto del terminal no tardará en mostrar síntomas de que está próximo a dejar de ser efectivo.
3. Las aplicaciones tardan mucho más en abrirse o se quedan bloqueadas: Los fabricantes suelen ofrecer actualizaciones para el sistema operativos de los teléfonos dos años desde su lanzamiento (tres en los modelos de gama alta), pasado ese tiempo, las apps no estarán optimizadas para ese dispositivo.
4. El móvil se calienta incluso cuando no se utiliza: Que se caliente un poco la pantalla cuando se lleva un rato hablando por el teléfono o jugando es habitual, pero si la temperatura sube incluso cuando está en reposo es porque algo no funciona bien. Ese algo suele ser la batería, que si alcanza demasiada temperatura puede llegar a estallar (aunque es poco probable). Hay que llevarlo al servicio técnico o cambiarlo.
5. El móvil no carga bien (y el cargador funciona): Los puertos de carga también se desgastan y estropean; de todas formas, si falla conviene limpiarlos -con mucho cuidado- con un espray de aire comprimido pensado para este fin, con un cepillo pequeño suave o retirando posibles restos de la parte que está alrededor de las conexiones con un palillo o alfiler.
6. El teléfono está deformado o sobresale la batería: Sin duda, la señal más clara y reconocible de que es mejor apagar el teléfono cuanto antes, porque indica que los componentes de la batería se están descomponiendo y existe la posibilidad de un cortocircuito o incendio.
7. La batería se descarga muy rápido: En los iPhone hay una opción para saber el estado de la batería, pero en Android no es tan sencillo a no ser que el fabricante la haya incluido. Existen aplicaciones que indican en qué condiciones se encuentra, como 'Accubattery' o 'Ampere'.
8. El teléfono se reinicia solo o se apaga repentinamente: Suele ser indicador de que la batería está dando problemas, pero también puede ser una conexión de un cable que empieza a fallar o un componente interno que está en las últimas. Si no se trata de un móvil nuevo (en ese caso puede ser un defecto de fábrica), es un aviso importante de que en cualquier momento puede fallar. Se debe casi siempre a un fallo de la batería, que se puede sustituir fácilmente en algunos modelos, pero no en todos.
9. Fallan los botones: Los teléfonos móviles tienen pocos botones pero cuando el dispositivo tiene ya un tiempo a veces falla alguno (casi siempre el de encendido, lo que es un problema para reiniciarlo).
10. Tarda mucho en reiniciarse: No se trata de que le cueste un par de segundos más que cuando era nuevo, sino que tome más tiempo de manera notoria. Lo primero que hay que hacer es revisar el contenido: liberar la mayor cantidad de espacio posible en la memoria. Si después de esto nada cambia, es hora de ir pensando en comprar otro teléfono.