Más de 5.000 millones para mejorar la Atención Primaria, las Urgencias y reducir las listas de espera

Martínez ha quitado hierro a este menor incremento y ha asegurado que «en Salud tenemos presupuestos, lo que nos falta son médicos y ese es la principal trabaja que tenemos par resolver todos los problemas de salud que tenemos identificados». «Tenemos más medios que nunca, pero necesitamos más porque hay una mayor demanda de asistencia», ha indicado. El Gobierno vasco dedica 2.300 euros a gasto en salud por persona.

Entre las medidas previstas para reforzar la Atención Primaria se encuentra la convocatoria de una OPE especial para tratar de ocupar 108 plazas médicas de difícil en los centros de salud y hospitales comarcales que llevan tiempo vacantes, ya sea por cuestiones geográficas o porque sus turnos son poco atractivos para los profesionales. Esta oposición se llevará a cabo mediante un concurso de méritos y los facultativos que se hagan con ellas deben comprometerse a permanecer en ellas durante 4 años, antes de solicitar un posible cambio de destino. Salud prevé reducir también la carga burocrática que soportan los facultativos de este nivel asistencial, tal y como le reclaman los trabajadores.

Además se ha creado un grupo de trabajo para definir una serie de medidas que permitan mejorar el funcionamiento de este nivel asistencial y que se quieren comenzar a aplicar a finales de año. La intención es también extender la fisioterapia a toda las unidades de Atención Primaria de Euskadi, así como dar los primeros pasos para incorporar psicólogos a este nivel asistencial.

La de Atención Primaria no será la única OPE prevista a medio plazo. Salud activará a finales de 2025 una nueva convocatoria que rondará las 3.000 plazas para estabilizar a la plantilla y reducir el número de personal interino en Osakidetza. Antes deberá resolver completamente las oposiciones pendientes del mandato anterior, que permitirán la consolidación de más de 11.000 profesionales de Osakidetza.

A nivel asistencial Salud tiene previsto insistir en la reducción de las listas de espera hospitalarias. Para ello va a examinar la situación de cada OSI para definir qué acciones concretas para mejorar las demoras se pueden adoptar en cada una de ellas. También se realizarán derivaciones de pacientes entre áreas sanitarias de la propia Osakidetza para que tengan que esperar menos para una operación, una consulta o una prueba.

Salud también va a analizar el actual modelo de derivación de pacientes desde la sanidad pública a la privada. Un mecanismo que durante la etapa anterior fue precisamente una de las herramientas en las que se apoyó Osakidetza para disminuir las demoras en algunas especialidades hospitalarias. Martínez ha defendido que, en un contexto de falta de médicos, es «necesario» realizar este tipo de derivaciones a unas entidades con gran trayectoria en Euskadi.

En lo que no ha entrado el consejero en harina es en el plan para la mejora de las Urgencias hospitalarias. Estas unidades han registrado en los últimos años varios episodios de colapso, como los vividos en Basurto o en Txagorritxu, lo que ha hecho que un volumen significativo de pacientes tuviese que esperar horas para ser atendido.

Además el Gobierno vasco seguirá insistiendo en mejorar la atención del cáncer. Para ello se prevé elaborar un nuevo plan oncológico que incluya la extensión de los cribados de los tumores de cérvix, mama y colon e incorpore pruebas de detección precoz de los de pulmón y próstata.

Sí se entra en el presupuesto de Osakidetza en sí, que asciende a 4.106 millones de los que el 65% se dedica a gastos de personal, el 31% a gastos de funcionamiento y el 3,9% a inversiones. En concreto para este último capítulo Salud ha reservado 160 millones que destinará a la mejora de centros de salud y hospitales.