A 139 kilómetros hora y con 40 toneladas de carga mal asegurada
La Guardia Civil de Miranda inmoviliza en la AP-1 un camión que era «un peligro rodante para todos los usuarios de la vía»
Cristina Ortiz
Martes, 28 de octubre 2025, 13:26
Una velocidad de hasta 139 kilómetros a la hora, con una carga de 40 toneladas de peso mal estibada y jornadas de conducción que excedían el máximo permitido, figuran entre las infracciones que detectó la Guardia Civil de Tráfico de Miranda en un camión que circulaba por la AP-1 en las inmediaciones de la ciudad y que les llevaron a su inmediata inmovilización, convencidos de que la combinación de todos esos factores convertía al transporte en «un peligro rodante para todos los usuarios de la vía».
Hasta tal punto se ha considerado grave la situación que se ha decidido poner fuera de circulación ese vehículo pesado de gran tonelaje, tal y como ha comunicado el Subsector de Tráfico de la Benemérita en Burgos.
El grupo de Cinemómetros del destacamento de Miranda registró la velocidad en su aparato de radar del vehículo pesado cuando circulaba a 125 km/h, muy por encima del límite de 90 km/h fijado para la vía y este tipo de transportes.
Ante la magnitud del exceso y la sospecha de que pudiera haberse manipulado su limitador de velocidad —un dispositivo obligatorio en este tipo de vehículos—, se dio aviso inmediato al grupo de Especialistas en Transportes del Subsector de Tráfico de Burgos, que llevó a cabo una minuciosa inspección tanto de la cabina del conductor como del remolque que transportaba.
Como resultado, los agentes intervinientes pudieron conocer que no era la primera vez que el camión circulaba a una velocidad imprudente. El análisis de los datos contenidos en el tacógrafo arrojó excesos reiterados, entre ellos un tramo constante de seis minutos a 139 km/h, lo que supone una marca desorbitada para un vehículo de estas características.
Paralelamente, se descubrió que la carga estaba mal estibada, lo que, a esas velocidades, multiplicaba el riesgo de accidente: un simple desplazamiento de la mercancía habría alterado el centro de gravedad del vehículo, comprometiendo por completo su estabilidad y capacidad de maniobra en curvas o frenadas.
A ello se sumaban otras irregularidades: un limitador de velocidad que no funcionaba correctamente, jornadas de conducción que excedían lo permitido por la normativa y maniobras antirreglamentarias durante la circulación, como adelantar por el tercer carril de la autopista, reservado únicamente a vehículos ligeros.
De haberse producido una retención —frecuente en este tramo—, la Guardia Civil asegura que «la elevada velocidad y el peso del vehículo habrían hecho imposible detenerlo en condiciones seguras, con consecuencias potencialmente catastróficas».
Por ello, como resultado de las actuaciones policiales realizadas, el vehículo fue inmovilizado, se han confeccionado varios boletines de denuncia por todas las infracciones observadas, que ya han sido remitidas a la autoridad competente para su valoración y, en su caso, posterior sanción.