«Mi partido decidirá con quien pacta para que podamos gobernar»
La pérdida de la mayoría absoluta al caerse un concejal o obliga a los nacionalistas a buscarse un aliado. «No cerramos la puerta a nadie», matiza la candidata a la Alcaldía, Ainhoa Salterain
A pesar de haber perdido 554 votos y, Ainhoa Salterain se muestra satisfecha de los resultados. «Afrontamos un relevo y tienen sus peligros. Hace ocho años vivimos una situación similar y ocurrió lo mismo», argumenta contenta al lograr mantener al PNV la fuerza más votada en la localidad. Pero no es suficiente para hacerse con la makila, su partido debe buscar ahora aliados para alcanzar la Alcaldía.
- Han ganado las elecciones, pero han perdido la mayoría absoluta que han gozado esta última legislatura.
- Es verdad que hemos perdido la mayoría absoluta, y visto desde fuera, puede parecer un drama. Pero lo cierto es que afrontamos un relevo. Hace ocho años vivimos una situación similar, cuando se hizo el relevo entre David Latxaga y Andoni Agirrebeitia. Y ocurrió justamente lo mismo, también sacamos ocho concejales. Y ese es nuestro escenario, es tan real que el partido comunista de Amorebieta saque un concejal pase lo que pase y haga lo que haga. Creo que otros partidos como el PSE o EH Bildu tienen otras preocupaciones, pero nosotros estamos bien. Los relevos tienen sus peligros.
- ¿A qué se refiere?
- Creo que los cambios, en general, provocan incomodidades. Puede pasar desde que no he sido nunca alcaldesa, a que guste o no guste mi cara… Es normal. Y para ser un relevo, vuelvo a decir, me siento muy orgullosa. Y no hablo sólo de mi candidatura, sino de las 19 personas que han venido conmigo y de la campaña que hemos hecho. Creo que ha sido un conjunto de todo esto lo que nos ha permitido volver a ser la fuerza más votada. Y te lo digo con toda la humildad del mundo, nos hemos matado a trabajar. Estaba muy bien planificada y diseñada, y lo hemos dado absolutamente todo. Y eso creo que nos ha permitido mantener los ocho concejales.
- Sin embargo, han perdido un representante.
- La ola general también podía habernos sacudido a nosotros, y como digo, creo que la campaña que hemos hecho nos ha permitido aguantar eso.
Una decena de proyectos
- No obstante, ha habido un descenso en el número de votos con respecto a 2019.
- 2019 fue el mejor escenario que ha tenido el partido en su historia. Fue completamente excepcional y creo que todos estamos de acuerdo en ello. Aun así, en comparación, nuestro porcentaje de voto de este domingo es de dos puntos y medio menos. Y volviendo a cifras más estables, hemos sacado un mayor porcentaje de votos que hace ocho años, pasando de 42,79% al 43,64% de estas elecciones. Es decir, estamos ante el segundo mejor dato desde la escisión. Tenemos 4.104 votos, o sea, creo que tengo muchas razones para estar contenta.
- Al no poder gobernar en solitario, toca buscar aliados.
- Sí, pero eso es algo que no me corresponde a mí. Yo soy la candidata del partido, pero tengo un lehendakari y una organización municipal que supongo, atendiendo a lo que hemos hecho otras veces, que establecerá un equipo de trabajo, una comisión, que hablará con todos los partidos.
- Ya han gobernado con el PSE-EE. ¿Podría volver a repetirse el pacto?
- Esto es política. Y nosotros, por mucho que digan lo que digan, somos pactistas y hablamos con todo el mundo. No cerramos la puerta a nadie. Entonces, habrá una ronda con todos los partidos políticos y ojalá, guardemos algo con alguno de ellos. Porque seguimos teniendo diez proyectos que van a hacer de Amorebieta-Etxano el mejor pueblo para vivir.
- Confía en levantar la makila el próximo día 17.
- Ojalá mi partido acuerde con alguien que nos posibilite estar en el Gobierno. Tenemos una capacidad de trabajo importante, muchas ideas, ganas e ilusión.
- ¿Cómo vivió la noche electoral?
- Muy contenta y emocionada, no puedo decir más. La vivimos en el batzoki, rodeada del entorno de PNV y fue todo magnífico. Ahora podemos decir que ha merecido la pena todo el trabajo que hemos realizado en estos once meses de campaña, que ha sido un no parar.
