Bizkaia | Resultados elecciones forales 2023

El PNV logra una victoria amarga que convierte a Etxanobe en la primera diputada general

Los nacionalistas obtuvieron el 38,3% de los apoyos, casi cinco puntos menos que en 2019. Si hablamos de porcentajes el resultado es mejor que el obtenido por Rementeria en su estreno en 2015 y por José Luis Bilbao cuatro años antes, el problema es que ha supuesto dejarse por el camino 52.000 votos. Los insistentes llamamientos que todos los referentes jeltzales han hecho durante las últimas semanas para movilizar a sus simpatizantes no parecen haber tenido la eficacia deseada. La temida abstención se elevó seis puntos hasta rozar el 40%.

La segunda fuerza en las Juntas Generales volverá a ser EH Bildu, aunque el salto adelante es considerable. La coalición soberanista obtuvo ayer los mejores resultados de su historia en la carrera foral, a la que concurre desde 2011. Creció hasta obtener el 25% de los apoyos -cinco puntos y 16.000 votos más que en 2019- y pasará de 10 a 15 apoderados. La distancia con el PNV en sufragios y escaños ha quedado recortada a la mitad, y aunque el independentismo está lejos aún de poder presentarse como una alternativa al histórico dominio jeltzale, nunca había estado tan cerca.

La elección de un candidato experimentado y conocido como Iker Casanova, la apuesta por un perfil más socioeconómico que ideológico y el rédito electoral que pueden haber supuesto los logros en el Congreso de los Diputados parece haberle funcionado a EH Bildu. Su objetivo era penetrar en las grandes urbes del Bilbao metropolitano y la Margen Izquierda, y algo de eso hay porque sube en ambas circunscripciones.

La tercera fuerza del Parlamento vizcaíno volverá a ser el PSE-EE. Teresa Laespada se dejó ayer 13.000 apoyos pero la formación socialista volverá a tener 8 representantes. Detrás llega el PP, la única formación junto a EH Bildu que mejora sus resultados respecto a 2019. Los populares, con Raquel González a la cabeza, recuperan votantes del PNV y pasan de 2 a 3 apoderados tras ganar un 1,6% y más de 4.700 sufragios. El extremo contrario es el de Elkarrekin Podemos, que confirmó su declive al caer de 6 a 2 escaños tras dejarse por el camino más de 23.000 seguidores. La coalición morada pasa a formar parte del Grupo Mixto al no tener el número de aforados necesarios para tener grupo propio.