Douglas echará el cierre a todas sus perfumerías de Bilbao
Prevé la clausura de 11 de sus 19 tiendas vizcaínas y el despido de 76 de 133 trabajadores
La profunda crisis de la perfumería Douglas tendrá efectos devastadores en Bizkaia. La compañía alemana prevé el cierre de 11 de sus 19 tiendas y ... el despido de 76 de 133 empleados. La empresa no dejará operativo ni un solo punto de venta en Bilbao tras el cese de la actividad en los establecimientos de Autonomía, junto a La Casilla, Ercilla, San Ignacio y la calle Santa Clara, en el barrio de Santutxu. Además de estas tiendas, cerrarán también las de Portugalete, Santurtzi, Sestao, Algorta, Abadiño y las que funcionan en los centros comerciales de Max Center, en Barakaldo, y Ballonti.
En las protestas que los trabajadores vienen protagonizando en las últimas semanas en las entradas de los centros se quejan de la negativa de la empresa a mantener cualquier tipo de negociación. Los afectados aseguran que la dirección no les ofrece «ninguna respuesta» ni contesta tampoco a los correos electrónicos que les han enviado para tratar de encauzar la situación. «Tampoco nos cogen el teléfono. Hacen oídos sordos a todas las reclamaciones que les hacemos llegar», explican empleados de Douglas, que pretenden mantener una reunión «personal» con directivos de la firma en Bizkaia. «Queremos que vengan aquí para hablar directamente», reclaman
«Otra muerte anunciada»
La situación laboral ha empeorado «de forma notable» en los últimos días. Los trabajadores lamentan que la empresa no tiene ninguna intención de recolocar a los 76 trabajadores que «mandará a la calle», pero advierten que la situación «tampoco va a ser muy buena» para los que sigan. Denuncian que hay perfumerías donde en estos momentos solo trabajan «uno o dos dependientes. Nos están boicoteando», reprochan. «A la vez que aplican un ERE a las tiendas que quedan abiertas, les van a aplicar una modificación sustancial en el tema de incentivos; vamos, que otra muerte anunciada», protestan.
El mundo de la perfumería vive en Bizkaia una revolución marcada por un continuo trasiego de cierres e incorporaciones que se ha llevado por el camino negocios tradicionales como el de la legendaria Barandiarán o, más recientemente, Marionnaud. La cadena francesa propiedad de un multimillonario chino procedió antes del estallido de la pandemia a la clausura de las diez tiendas que tenía repartidas por Bizkaia. Contextualizó este operación en una estrategia global que supuso la salida de la firma gala de los mercados español y portugués para volcarse en otros países europeos y asiáticos.
Estos repliegues han coincidido con el desembarco de potentes cadenas nacionales que han adquirido un gran protagonismo en la escena de la belleza y cosmética bilbaína. Al aterrizaje de la valenciana Druni, en la calle Astarloa, hay que sumar el de la andorrana Júlia, que presume de ofrecer los precios más baratos, y el del gallego Grupo Arenal. Tras hacerse con la antigua sede de Banesto de la calle Navarra, sumó otro establecimiento en Iparraguirre.
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