El incendio en Zorroza obliga a descartar 30 toneladas de productos cárnicos
Serán procesados por una empresa de Burceña, mientras otras 70 toneladas se han podido salvar para el consumo humano con aval sanitario
El incendio de grandes proporciones que afectó la madrugada del lunes a una nave en Punta Zorroza, en las cercanías del antiguo matadero, ha convertido en inservibles para el consumo humano 30 toneladas de productos cárnicos, que serán procesadas por una empresa de Burceña, Sebería Bilbaína, que realiza subproductos, como pienso. Otras 70 toneladas se han podido salvar, tal y como han constatado los especialistas en Sanidad que han analizado todo el género afectado. Varios peritos también visitaron el miercoles las instalaciones.
En el polígono trabajaban 13 empresas dedicadas al sector alimentario – todas al cárnico, excepto una de huevos– que se dedicaban a almacenar, despiezar o procesar la carne, que después se distribuía entre carnicerías locales o incluso del extranjero. Algunas de renombre como La Casa de La Carne o la histórica empresa Burutxaga. Allí ambién funcionaba una escuela de formación, una consultoría alimentaria y otro negocio de un colectivo de carniceros. Empleaban a más de cien trabajadores. Aunque la planta baja, donde se situaban las instalaciones industriales, ha quedado poco afectada, en algunos casos las cámaras se pararon por la entrada de agua, lo que inutilizó parte del género. Mientras, la planta superior, de oficinas, ha quedado destrozada, así como la cubierta del edificio.
Ubicación alternativa
Según relató el veterinario Álvaro Mateos Amann, que forma parte de la comunidad de propietarios desde hace más de 30 años, cuatro de las empresas alimentarias situadas en la nave, y que funcionaban principalmente como almacén, pueden continuar con su actividad. De las otras nueve, al menos cuatro han logrado ubicación alternativa para seguir trabajando. Aun así, la situación urbanística de Punta Zorroza, donde se prevén nuevos parques y unas 2.000 viviendas, genera incertidumbre a los propietarios, ya que a varios les desanima el hecho de invertir una buena cantidad en reflotar un negocio destinado a deslocalizarse. Por eso, indicó, algunos propietarios podrían aprovechar esta coyuntura para trasladarse definitivamente o para jubilarse. Las cuantías que ofrezcan los seguros también serán determinantes.
En la nave existían siete módulos vacíos en los que solían pernoctar personas sin techo. La noche del incendio desalojaron a cuatro. Las causas se desconocen y los propietarios aguardan el informe de los bomberos.