Bilbao se pone guiri: cada vez hay más hombres con chanclas y calcetines blancos
Las influencias turísticas comienzan a calar hondo en la ciudad con esta estética kitsch
Estaba cantado que con el aluvión de turistas que recibe Bilbao y los calores tropicales de los últimos meses, íbamos a acabar tomando las costumbres ... de los foráneos. Lo que no estaba nada claro es que terminásemos repitiendo y copiando lo peor de ellos. Y pocas cosas hay más comprometidas, a juicio de este periodista, que las de salir a la calle, por mucho calor que haga, mezclando sandalias con calcetines. Pues bien, no se sabe, pero cada vez se ve a más gente, mayoritariamente hombres, de esta guisa.
Incluso quienes apuestan por un estilo que difundieron aquellos turistas alemanes, suecos e ingleses que llegaban a las playas españolas en los años 70 ignoran por qué se aferran a unas tendencias con tantos detractores como, por lo que se ve, partidarios.
Vayamos por partes. Iñigo Díaz, un joven de 22 años, estudiante de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, suele hacer esto último (deporte) por el Paseo El Canal de Deusto. El chaval se pone su camiseta azul, su mochila negra, los cascos de música del mismo color, a tono con el pantalón corto de deporte y... ¡zas! Remata la vestimenta con chanclas azul marino con calcetines. Bien altitos, por cierto, para que se distingan desde bien lejos, y de un blanco totalmente nuclear. Explica que lo hace sobre todo en verano. E insiste en que no sabe explicar el porqué de esta vestimenta. Pero sí recuerda que lo vio «hace tiempo» y, he aquí la sorpresa, que le «gustó». Y bastante. Ya se sabe que hay gente para todo.
El lisboeta Camilo Moura anda de Erasmus por Bilbao y parece que le paga Nike. Viste camiseta Nike, chanclas Nike y calcetines Nike. Seguramente el pantalón corto sea también de la misma marca deportiva. Se le ve feliz por la Gran Vía. Y, sobre todo, cómodo. Discrepa de quienes piensan que esta combinación tan antigua sea «una horterada y muy kitsch». Para nada. Lo ve como un atuendo muy funcional y «con su punto». Y muy juvenil. Y muy «a la última». Y muy «en boga», subraya, entre la gente más moderna. Y muy... Ya se cansa de justificarse mientras enfila, con una sonrisa, hacia la Plaza Moyua.
No son pocos los que discrepan que las chanclas con calcetines sean una historia de muy mal gusto. Y, por supuesto, vulgar. Ponen el acento en que estos modelos no los patentaron, como muchos creen, los turistas ingleses en Benidorm. Aseguran que ya las usaban los romanos hace más de 2.000 años.
Quizá por eso no solo los jóvenes tiran de chancletas. En los días previos y posteriores de la última Aste Nagusia, Bilbao se llenó de turistas, tanto extranjeros como nacionales, entrados en años que echaron mano de este look. Por muchas reprobaciones que suscite, algo debe tener por el entusiasmo que despierta. Porque en Bilbao se sale así por el día y a la noche. A pasear y correr. A lo que sea. Cada vez más.
Que nadie olvide, además, que Louis Vuitton, la marca por excelencia del lujo mundial, ha lanzado en sus últimas colecciones chanclas femeninas de 1.200 euros que las modelos combinaban... ¿adivinan? Pues sí, con calcetines blancos. Solo hay que echar un vistazo a Instagram para dar cuenta de lo que molan los uniformes guiri. O ver que Kendall Jenner, icono entre los iconos fashion, sucumbe también a esta historia. ¿Por qué no entonces también en Bilbao?
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