Una propuesta de los jardineros de Vitoria abre la puerta al desbloqueo de 6 meses de huelga
Enviser se compromete a responder mañana mismo la última solicitud de los trabajadores, que busca reducir la distancia en materia salarial
La imagen de Vitoria, con parques asilvestrados, setos desbordados y jardines sin cuidar desde hace más de seis meses, podría empezar a cambiar. Este martes, ... tras la séptima reunión en el Consejo de Relaciones Laborales del Gobierno vasco (Preco), se ha abierto una puerta a la esperanza en un conflicto que mantiene a la ciudad sumida en un deterioro verde inédito.
El comité de empresa de Enviser, la compañía subcontratada para el mantenimiento de las zonas verdes, ha presenta una nueva propuesta económica que califica como «realista», en línea con lo solicitado por el Ayuntamiento. A diferencia de ocasiones anteriores, los representantes de la firma no rechazan de plano el planteamiento y se comprometen a dar este jueves una respuesta definitiva.
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Si la empresa da el visto bueno, la huelga que ha convertido parques y jardines en símbolo del conflicto laboral quedaría desbloqueada. En caso contrario, el comité advierte de que la mediación a través del Preco estaría agotada y que la negociación debería entrar en otra fase, aún más incierta.
El salario sigue siendo el núcleo del enfrentamiento. Las diferencias iniciales, de unos 500 euros mensuales, se han ido reduciendo hasta situarse en torno a los 300. La propuesta presentada ayer estrecha un poco más esa brecha e incluye, además, dos puntos clave para los trabajadores: un incremento salarial significativo en 2025 y la definición de un marco de actuación ligado al futuro contrato de siega de las zonas verdes, que entrará en vigor en 2028, con la aspiración de prolongarlo hasta 2029.
Los empleados están más optimistas tras no rechazar la empresa su planteamiento y prometer una respuesta inmediata
En el plano social, los acuerdos ya están cerrados, como la reducción de la jornada anual, de modo que la cuestión económica es el último obstáculo. La reunión de este martes ha sido breve, pero deja un poso de optimismo en la parte social, muy distinto a la frustración acumulada en citas previas.
La próxima cita podría ser definitiva: o se sella el acuerdo que devuelva el pulso a los parques y jardines de Vitoria, o la huelga se enquista y la ciudad seguirá mostrando, en cada rincón de césped alto y cada arbusto sin podar, las huellas visibles de un conflicto que ya dura más de medio año.
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