Familias alavesas ofrecen un verano «seguro y tranquilo» a niños ucranianos
Seis chavales disfrutarán durante dos meses de un respiro en el territorio gracias al programa de la asociación Chernóbil. En totalllegarán 89 a Euskadi y Navarra
Seis menores ucranianos de Chernóbil vivirán en Álava un verano en paz. Lo harán lejos del entorno contaminado por la central nuclear que desde ... 1986 ha cambiado muchas vidas. Y de un país que sufre las devastadoras consecuencias de la guerra tras la invasión de Rusia. Sus nombres son Sofiia, Sasha, María Dmytro, Sofiia y Nikita. Y sus edades, entre seis y doce años. La asociación Chernóbil vuelve a poner en marcha el programa extraordinario de respiro en el que familias alavesas abren desde este martes las puertas de sus casas a estos chavales para que pasen «al menos dos meses en un entorno seguro y tranquilo», como detallan desde el colectivo.
Pero el grupo es mucho más amplio. En total, serán 89 menores de familias cuyos bajos recursos les impiden huir del área de Chernóbil para iniciar una vida mejor los que encontrarán en Euskadi un refugio donde recuperar energía. Algo más de la mitad de ellos vivirán esta experiencia por primera vez. Los muchachos llegarán esta noche a Irun (21.30 horas, junto al centro comercial Txingudi), después de dos días de viaje en autobús. Junto a ellos han viajado tres monitores de Ucrania y tres voluntarios de la asociación.
Las 33 familias guipuzcoanas que acogerán a otros tantos chavales ucranianos estarán esperándoles en esta primera parada. Porque el convoy solidario continuará la marcha. Un autobús se dirigirá con 27 jóvenes hacia Bizkaia (parará en el BEC) y otro, con 23 chavales, lo hará hacia Navarra (hará parada en el polígono Cordovilla, junto al hotel BED4U). Las familias alavesas se desplazarán, según mejor les venga, a uno de esos dos puntos para recoger a los chavales. Dos de los niños se alojarán en Vitoria, otros dos en Anda y los dos restantes en Antziniega y Amurrio.
Convoy humanitario
El regreso del grupo a Ucrania está previsto para finales de agosto, aunque «por el momento la fecha no se ha concretado debido a la situación convulsa que vive el país». «Desde la asociación Chernóbil queremos lanzar nuestro agradecimiento a las familias que han hecho posible el viaje de un número tan importante de niños», apuntan. Porque, añaden, «es primordial que puedan pasar esos dos meses en un entorno seguro y tranquilo».
No obstante, esta no es la única acción de una asociación que lleva dieciséis años dando aire a una generación ahogada por el accidente nuclear y ahora también la guerra. De forma paralela, en la última semana ha comenzado a distribuirse en Iankiv (al norte de Ucrania) la ayuda humanitaria enviada por la asociación. En total, se mandarán nueve toneladas de ropa, medicina, productos de higiene o calzado, entre otros artículos recolectados en distintas campañas.
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