Los alumnos de Durango que participan en STARTInnova presentan a su alcaldesa las ideas con las que compiten

Nada menos que cuatro de los cinco finalistas en la categoría para mayores de 18 años de la última edición de STARTInnova salieron de Durango. Concretamente, de la Ikastola Ibaizabal, uno de los centros que tiene al Ayuntamiento del municipio por mentor y que su alcaldesa, Mireia Elkoroiribe, ha visitado para aportar sugerencias a los alumnos que ultiman ya las ideas de negocio con que compiten esta vez. «Con este programa, los alumnos consiguen aprender de manera creativa llevando a cabo un proyecto desde cero, y desde el Ayuntamiento es una gozada poder estar con ellos y ver cómo mejoran cada día aportando ideas que son muy interesantes para la ciudadanía', señaló tras escuchar todas sus presentaciones.

Este año, en la ikastola Ibaizabal expusieron sus ideas tres grupos, todos tutelados por Iratxe Bernedo y todas centradas en las necesidades de educativas de los más pequeños. Para empezar, Maeva, Asier, Eider y Ane preparan el plan de viabilidad de una aplicación que venderían a los colegios para facilitar que las familias de alumnos de hasta seis años y el profesorado pueda ponerse en contacto entre sí a través de un chat. Desde la 'app' además, los centros educativos ofrecerían a los padres detalles sobre la agenda, horarios, menús y otras informaciones de interés.

Los otros dos grupos, en cambio, se plantean en cómo llevar la atención a la infancia más allá de las aulas. Por un lado, Oier, María, Laura y Lexuri han pensado en la puesta en marcha de una empresa dedicada a la musicoterapia para ayudar a niños con problemas con el habla, las relaciones afectivas o de psicomotricidad. Por otra parte, Jabbar, Malen, Xabat y Maren, quieren acercarlos a la naturaleza a través de un 'baserri eskola' que, además de organizar actividades familiares, vendería a comercios locales todo lo producido en su huerta.

En el Colegio Jesuitak Durango, a Mireia Elkoroiribe e Iker Txertudi, concejal de Juventud y Deporte, les esperaban cinco grupos, que preparan sus ideas de negocio bajo la tutela del profesor Aitor García.

Los tres primeros entrarían dentro de la llamada economía plateada, que atiende las necesidades de los mayores. Asier, Iker, Udane, Itsaso e Illan quieren poner a la venta robots dotados con Inteligencia Artificial para dar conversación a los ancianos que vivan solos, a los que además de compañía les ofrecería seguridad ya que les ayudaría a controlar su salud y seguir los tratamientos médicos. En esta misma línea va el proyecto de otro de los grupos, el compuesto por Saúl, Unax, Telmo y Danel, cuyo robot estaría dotado con sensores de movimiento, lo que permitiría ayudar a los usuarios a realizar determinados movimientos como levantarse. Ambas ideas se podrían completar con la propuesta de Iván, Eneko, Maite y Naroa, quienes han ideado un dispositivo que recordaría a los mayores cuándo tienen que tomar la medicación o hacer ejercicio.

Sus compañeros Manex, Aimar, Laida y Ariane han pensado en mejorar la tecnología de los auriculares que ya existen en el mercado para nadadores y que funciona por Bluetooth, un producto que comercializarían, entre otros canales, a través de máquinas de vending en las propias piscinas. Por su parte, Iñaki, Martín, Lucía y Yusenka han pensado, en cambio, en una linterna que podría sacarnos de más de un apuro ya que se recargaría con energía solar y contendría dentro de la propia estructura un pequeño kit de emergencias en el que poder guardar vendas, por ejemplo.

Por último, en el instituto Fray Juan de Zumárraga, Elkoroiribe y Txertudi, escucharon la exposición de otros tres grupos, todos ellos tutelados por Arantza Idigoras. En el primero, Ander, Rafaella, Assia y Lorea proponen la creación de una empresa en la que psicólogos y logopedas ayudarían a niños que lo necesiten sustituyendo las terapias al uso por juegos para lograr que los pequeños perciban el centro como un espacio de tiempo libre.

Sus compañeros Maider, Anartz, Uxue y Maider han pensado en las mujeres que regresan solas a casa de noche, a las que ofrecen una app desde la que enviar tu localización a los contactos previamente establecidos y a la Policía al tiempo que pone en marcha la grabación del audio «para que sirva como prueba». Además, contará con un foro para que las usuarias puedan alertase entre sí por si detectan algún peligro en una ruta determinada.

En el último grupo, Helena, Manex, Malen, Mirari e Ibrahim quieren utilizar la tecnología para paliar la soledad a través de una aplicación que les serviría para apuntarse a planes como excusiones o visitas culturales con otras personas. Además, también quieren ayudar a que se cuiden ofreciendo a aquellos usuarios que lo necesiten la posibilidad de suscribirse al servicio de comidas, en el que enviarán a domicilio menús personalizados.

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