Salud realizará pruebas en cinco colegios de Bizkaia para detectar casos de tuberculosis
Una persona de la comunidad educativa con contacto con estos centros ha contraído la enfermedad
El Gobierno vasco ha puesto en marcha un protocolo de prevención para tratar de detectar y frenar, llegado el caso, un posible brote de tuberculosis en varios colegios de Bizkaia. El Departamento de Salud va a realizar pruebas diagnósticas a alumnos y profesionales de cinco centros escolares del territorio después de que se haya detectado un caso positivo en un miembro de la comunidad educativa con relación con estos colegios situados tres de ellos en Bilbao y los otros dos en Arrigorriaga y Ugao. Con este rastreo Salud va a tratar de esclarecer si existen casos en estos centros.
La persona afectada se encuentra en tratamiento y el estudio que se ha realizado a sus contactos estrechos no ha revelado ningún contagio. Desde Salud subrayan que la tuberculosis es una enfermedad que «habitualmente no es grave en nuestro entorno y que se cura con un tratamiento adecuado» con antibióticos. Se trata de una patología infecciosa causada por una bacteria que suele afectar a los pulmones. Se puede contagiar por vía aérea al toser o al hablar, pero generalmente es necesario que exista convivencia íntima y prolongada con personas enfermas.
En el caso de la persona del ámbito educativo que ha dado positivo, Salud recalca que sus periodos de exposición con el alumnado de estos cinco colegios y con el resto de profesionales han sido cortos. Lo que sumado a que ha empleado mascarilla FFP2 hace que el riesgo de transmisión sea «bajo». Aún así, y por prevención, se va a ampliar el estudio de contactos a los contactos de ámbito escolar.
Las dos pruebas más empleada para detectar la tuberculosis son una de tipo cutánea y un análisis de sangre. La primera Consiste en realizar un pequeño pinchazo con una aguja en el antebrazo con una sustancia para ver si hay presencia de tuberculina en el organismo. Al de 48 o 72 horas la persona es examinada de nuevo por el personal sanitario que se la ha realizado para ver si se ha registrado alguna reacción en la piel que indique un posible positivo. En caso negativo es habitual que este test se repita al de dos meses para confirmar que esa persona no está infectada.
El estudio que ha puesto en marcha el Departamento de Salud se prolongará durante mayo y junio en los cinco centros. Su objetivo prioritario es detectar de forma precoz los posibles casos de esta enfermedad para iniciar cuanto antes el tratamiento.
La consejería ha informado tanto a los cinco centros educativos afectados como a las familias de los alumnos que van a ser sometidos a pruebas. En los próximos días están previstas diferentes reunines con los progenitores y los trabajadores de los colegios para atender cualquier duda que les surja.
Euskadi, la tercera comunidad con mayor prevalencia
La tuberculosis está presente en la mayor parte de los países y se estima que cada año la padecen más de 10 millones de personas, de las que cerca de un 10% fallece, según la OMS. La infección por el bacilo que provoca esta patología es relativamente común, aunque lo que es menos habitual es que se desarrolle la enfermedad. Solo entre el 5 y el 10% de las personas infectadas acaban enfermando. Y son estos últimos los que pueden transmitir una patología curable que se trata con antibióticos.
Los últimos datos publicados en España corresponden al ejercicio 2022. Aquel año se identificaron 3.927 casos, en su inmensa mayoría autóctonos. Solo 211 fueron declarados como importados, según figura en el último informe publicado por la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Renave). Aunque prácticamente en la mitad de los casos -el 46%- se trata de personas que nacieron fuera de España. De todas estas personas 162 fallecieron.
En este documento se recoge que por primera vez en una década el número de casos de tuberculosis en el conjunto del país ha registrado un crecimiento con respecto al año anterior. Se rompe así una tendencia descendente iniciada en 2013. Este incremento no es exclusivo de España. Es algo que se está dando a nivel mundial, según la OMS. Aún así la prevalencia de esta enfermedad en el país se mantiene en niveles inferiores a los registrados en periodos precedentes. Su incidencia en el conjunto de España no llega a los 8 casos por cada 100.000 habitantes.
Por encima de esta media se encuentra Euskadi. La vasca es la tercera comunidad como mayor tasa de notificación. Se sitúa en 10,98 casos por cada 100.000 habitantes, lo que equivale a un total de 241 diagnósticos realizados durante 2022. Por encima se encuentran Galicia (11,67) y Cataluña (12,70) como las autonomías con incidencias de tuberculosis más elevadas.
Lo que es generalizado en todos los territorios, salvo en Ceuta, es un descenso generalizado de las tasas de notificación. En Euskadi los casos identificados han disminuido un 7,25% desde 2015. La caída a nivel nacional es del 25,9%.
En cuanto al sexo de los afectados, es más habitual que la tuberculosis afecte más a hombres que a mujeres. El 63% de los enfermos diagnosticados el último año eran varones, en su inmensa mayoría adultos. Solo 199 -el 5% del total- fue detectado en menores de 15 años. Aún así en este colectivo también se ha detectado un repunte de los contagios.
Precisamente el pasado verano Osakidetza recuperó la vacunación en niños de hasta 5 años en situación de riesgo con un preparado conocido como BCG. Su administración había sido suspendida en 2015 por falta de suministros pero, una vez superada esa situación y ante el incremento de casos, se ha recuperado. El suero está indicado a niños que conviven con familias de países en los que la tuberculosis es endémica o en grave riesgo de exclusión social.