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Laura Pagliarini, enfermera de un hospital de Cremona, exhausta tras una jornada laboral. FRANCESCA MANGIATIRDI
La pandemia también tiene sesgo de género
Microfeminismos

La pandemia también tiene sesgo de género

Dicen que el coronavirus afecta con menor virulencia a las mujeres pero, por contra, estamos más expuestas al contagio: la mayoría de las profesiones que estos días prestarán cuidados y atención al público están feminizadas mientras seguimos asumiendo más carga de trabajo en el hogar

Lunes, 16 de marzo 2020, 03:20

Según los médicos, el coronavirus afecta en menor medida a las mujeres que a los hombres: la tasa de mortalidad en nosotras es de un 1,7% mientras que en los hombres asciende a un 2,8%. Razones biológicas, el estilo de vida... como en casi todo lo relacionado con este nuevo patógeno, los investigadores aún desconocen las razones del mayor impacto de la enfermedad en pacientes del sexo fememino. Pero, por contra, las mujeres tenemos por razones estadísticas más probabilidades de contraer la enfermedad debido a nuestro rol de cuidadoras, tanto en los hogares como en hospitales, centros de salud, residencias... En todos esos ámbitos y en muchos otros sectores que estos días van a estar en funcionamiento cara al público, como las farmacias, los supermercados o las peluquerías, somos amplia mayoría y por tanto estamos más expuestas a los contagios, a la vez que soportamos más estrés por esta circunstancia.

El sector sanitario se considera una de las profesiones más feminizadas que existen en el mercado laboral, ya que el porcentaje de mujeres frente a hombres que emplea supera el 55%. Según datos recientes de la EPA y el INE, las médicas suponen más del 56% de las pantillas, las farmaceúticas el 66% mientras que las enfermeras representan un abrumador 85%. Y ocurre lo mismo en peluquerías o supermercados: solo en Mercadona, una de las mayores cadenas de distribución del país, casi 7 de cada diez empleados son mujeres, la mayoría de ellas en cajas y despacho al público.

La empleada de una farmacia atiende a un cliente guardando la distancia recomendada por las autoridades. EFE

Y no acaba ahí el sesgo de género de esta pandemia.

«Si consigues teletrabajar y acceder al material online de la app del cole mientras tienes que dar de comer, conseguir que estudien y mantener vivos a varios menores te convalidan Teleco y te llaman para el Circo del Sol». Este comentario en Twiter de Beatriz Salvador se hizo rápidamente viral; una paradoja, como destacó, para una viróloga de profesión como ella. Al margen de la intensa preocupación que supone para todos una crisis como la que vivimos, sin prededente alguno en nuestra historia reciente, muchas mujeres nos reconocemos en el panorama que describe Salvador.

La alarma decretada por las autoridades ha dinamitado la vida cotidiana de todos los ciudadanos, pero para quienes deben cuidan de sus hijos, padres ancianos o de familiares dependientes supone un plus de descalabro. En general y salvo excepciones (que las hay y cada vez más, afortunadamente) somos nosotras quienes en mayor medida asumimos estas tareas y la rutina diaria de centenares de miles de familias, muchas veces sujeta con alfileres, ha saltado por los aires. Pero el reparto igualitario de las tareas del hogar es aún una entelequia. Según la última Encuesta Nacional de Condiciones de Vida, el porcentaje de hombres de 16 años y más que cuidan de personas dependientes es de un 9,6% frente al 13,2% de mujeres. Ellos invierten semanalmente 14 horas a las tareas del hogar y cuidados a la familia frente a las 26,5 horas que dedicamos nosotras. Según Oxfam, las labores que realizan, sin remunerar, las mujeres en el hogar supondría el 41% del PIB en España si se pagaran.

Los mayores y discapacitados, sin centros de día a los que acudir, y los niños, sin clase, en casa y con tareas escolares, pero ¿quién les atiende? Si nuestro puesto de trabajo ha cerrado temporalmente por la cuarentena o nos apañamos con el teletrabajo nos consideramos unas privilegiadas, aunque los parones que en oficina dedicamos a tomar un café y charlar con los compañeros ahora los invirtamos en atender a los pequeños, poner la lavadora o hacer la comida. Pero si como las sanitarias o dependientas debemos acudir al trabajo, en muchos casos duplicando jornadas y haciendo horas extras a destajo, y carecemos de la red que proporcionan los colegios, o abuelos, la situación es insostenible. Y amamas y aitites son pacientes de riesgo, estos días hay que estar más pendientes de ellos, cuidarles; si alguien debe quedarse en casa y no ir ni siquiera a la compra son ellos.

La empleada de un supermercado desinfecta su lugar de trabajo. EFE

Muchas empresas han ofrecido estos días a sus trabajadores la posibilidad de reducir jornada o coger una excedencia temporal mientras dure la crisis del coronavirus: no creo que arriesgue mucho si apuesto que quienes mayoritariamente van a acogerse a estas medidas son mujeres. En el caso de los permisos por cuidado de menores representaron en el último año el 92% del total y el 84 % en las excedencias vinculadas al cuidado de familiares dependientes.

Las consecuencias que nos deje la crisis del coronavirus son aún impredecibles aunque no hay duda de que serán (ya lo están siendo) catastróficas en el plano económico. Sus principales víctimas serán quienes asumen el trabajo más precario, que tiene rostro de mujer. Una de cada 4 mujeres trabaja a tiempo parcial frente a uno de cada 10 hombres. En España, estos empleados tienen el doble de riesgo de pobreza laboral que los que están contratados a jornada completa. Las mujeres, además son el 73,9% del nivel salarial más bajo. Así que que no nos digan que el coronavirus nos afecta menos, porque es mentira.

Y, para acabar, desear mucho ánimo y suerte para todos aquellos, sean hombres o mujeres, que estos días lo estan dando todo para cuidarnos y hacer que nuestra vida mantenga algo de normalidad dentro de la pesadilla que nos está tocando vivir. Nuestro agradecimiento infinito de parte de las mujeres que hacemos esta sección. Saldremos de esta y seremos, todos, más fuertes.

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