Retiran miles de botellas del agua embotellada más popular del mundo tras detectarse bacterias

Perrier, una de las marcas de agua más icónicas el mundo, se encuentra en entredicho tras detectarse bacterias en su planta de producción en Francia. La marca, que pertenece al grupo Nestlé, podría verse obligada a dejar de comercializar su producto tras admitir el uso de métodos de filtración ilegales para aguas minerales naturales. Es más, Perrier puede perder el título de «Mineral Natural».

Ante estos hechos, la empresa ha iniciado una auditoria de sus prácticas de filtración de agua, ha cerrado una línea de producción y ha bloqueado unas 300.000 botellas. Todo ello después de un dictamen «desfavorable» de hidrogeólogos del Gobierno francés, quienes deben determinar si continúan otorgando una licencia a Nestlé para utilizar los manantiales de Vergèze, su única fuente de producción de agua mineral Perrier.

Por su parte, Nestlé ha manifestado su desacuerdo con algunas de las conclusiones del dictamen. «Reiteramos que todas nuestras aguas minerales naturales Perrier son seguras para el consumo y que su mineralidad única siempre se ha conservado, tal como se indica en la etiqueta», indican.

No es la primera vez que Nestlé está bajo escrutinio por el tratamiento de sus aguas minerales. En 2024 tuvieron que reconocer el uso de carbón vegetal y filtros UV, prohibidos en Europa para las aguas comercializadas como «minerales».

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