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La Tamborrada se ha reinventado este año con motivo de su cincuenta aniversario. No solo salió ayer en horario vespertino por el centro de Vitoria para celebrar su medio siglo de vida. Tuvo un segundo acto, el tradicional, por la noche víspera de San Prudencio; velada en la que quienes se acercaron a la plaza de la Provincia pudieron disfrutar en vivo y en directo del estreno de 'Gasteizko Danborrada 50 urte'. Así es como se ha bautizado la pieza musical con la que José Mari Bastida, 'Txapi', ha querido festejar las bodas de oro de la Tamborrada.
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Su aportación a la fiesta se estrenó en la actuación que acogieron las escalinatas de la Diputación Foral de Álava a medianoche. Fue la cuarta canción del repertorio que inundó de música festiva la plaza foral. En las últimas semanas, los bombos, tambores, barriles y barriletes de la Tamborrada retumbaron en los ensayos en el Iradier Arena con una obra nueva que exigió atención a los directores de la tropa y cocineros –Leire Betolaza, Gotzon García Briñas y Koldo Justo– y oído para acompasar la melodía, que la han tocado dos txistularis, con los golpes de baqueta de cada participante. «La partitura, pensada para tambores, barriles y bombo, se basa en el Zortziko de San Prudencio con el ritmo cambiado, de cinco por ocho a dos por cuatro. De tamborrada, que suene a tamborrada: 'Los alaveses en este día en armonía y buena unión...'. Lleva una introducción original mía, después viene el tema del zortziko cambiado de ritmo y a continuación una parte de diálogo entre tambores y barriles para volver al tema del zortziko sin introducción», explica Bastida.
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