Un juzgado de Vitoria amenaza con multar a la dirección de EA si no repite las primarias

El mismo juzgado ya ordenó la celebración de las primarias el pasado 1 de marzo y daba un plazo de 15 días para la organización de las mismas. No obstante, la resolución fue desoída por la dirección del partido, que interpreta que con los estatutos actuales, modificados en el último congreso, poco antes de que se hiciera pública la sentencia, ya no hay margen de celebrar una consulta interna.

Ahora, el tribunal rebate esa perspectiva. «Lo que hecho el partido ejecutado es establecer un nuevo sistema de elección de la secretaría general apartándose de la condena de la sentencia para invocar ahora su capacidad de autorregulación», afirma el auto. «Capacidad de autorregulación -continúa- que al igual que no prevalece sobre la vulneración de otros derechos fundamentales no puede servir de instrumento para burlar el fallo de la sentencia, que aún no firme». «Es el propio partido el que se ha colocado en una situación de dificultad y rebeldía al acatamiento de la sentencia de la Audiencia Provincial», zanja.

Por tanto, sentencia que la elección de Blanco en febrero no es válida y que debería haberse repetido el proceso de primarias de 2019. «La reparación de la vulneración cometida (sobre Maiorga Ramírez) solo podía producirse mediante la repetición del proceso de primarias». Contra este auto no cabe recurso. El fallo, además, condena a EA a asumir las costas del proceso.

La situación es algo rocambolesca. En 2019 concurrieron a las primarias dos candidatos: Maiorga Ramírez, por el sector crítico, y Eba Blanco, por el oficial. De fondo se sitúa el debate sobre el encaje de EA en EH Bildu. Los críticos -afines a las tesis del exlehendakari Carlos Garaikoetxea-, consideran que Sortu ha fagocitado de facto a EA y que las tesis de la izquierda abertzale histórica son mayoritarias en la coalición.

Ramírez quedó descabalgado del proceso por no presentar los avales suficientes en Iparralde, pese a que presentó más de 400 en total, mientras que Blanco solamente reunió 55. Ramírez recurrió a los tribunales y Blanco ocupó la Secretaría General en funciones. La Audiencia de Álava consideró vulnerados los derechos de Ramírez y obligó a repetir aquellas primarias. El periplo judicial aún no ha terminado, ya que el Supremo tiene pendiente resolver un recurso.

Sin embargo, en febrero de este año EA organizó un Congreso Nacional en el que se cambiaron los estatutos y se dispuso que el secretario general ya no sería elegido por primarias, sino por los compromisarios en el cónclave. De esta manera, Eba Blanco fue proclamada líder del partido. El proceso provocó las quejas de los críticos que se negaron a participar e incluso organizaron su propio Congreso paralelo.