Los hermanos Pou abren dos nuevas vías en los Andes
La pareja vitoriana estrena las rutas 'Hanan Pacha' (90º/425 m) en roca y 'EMMOA' (M6/75º/640 m) en los picos Urus, ambas por encima de los cinco mil metros
Los hermanos alaveses Iker y Eneko Pou siguen haciendo historia con dos nuevas aperturas en la Cordillera Blanca del Perú. En compañía del huaracino Micher Quito, han inaugurado dos nuevas rutas tras explorar las inaccesibles agujas del Urus Oeste, de 5.450 metros de altitud.
Los Urus están situados entre las quebradas de Ishinca y Uruscocha formando un largo cordal con tres picos principales, todos ellos por encima de los 5.000 metros: Urus Este, el mas ascendido por tener una vía normal muy asequible; Urus Central, poco recorrido por los andinistas; y Urus Oeste, pico con contadas ascensiones. Este ultimo cuenta a su alrededor con varias agujas independientes que superan los 5.000 m y que son de enorme dificultad técnica.
Los Pou se habían fijado en este macizo en su anterior visita, en 2021, cuando, en la ultima actividad en la que recorrieron la quebrada de Ishinca, repararon en estas montañas difíciles y muy poco transitadas. Por eso eran perfectas para la pareja vitoriana, porque les podrían permitir sumergirse en ese alpinismo de exploración que tanto les gusta trazando nuevos itinerarios vertiginosos en estas esbeltas agujas. Y así fue, como tras seis horas andando, alcanzaron el Campo Base a pie del Urus Oeste, a una altura aproximada de 4.900 m, y al pie del glaciar del mismo nombre.
Si las temperaturas durante el día son agradables, durante la noche todo se congela a esa altitud. Así que a las cuatro y media de la madrugada, cuando sonó el despertador, fuera de la tienda hubiese 15º bajo cero. No fue impedimento para que ocho horas y media después, y con un día frío y desapacible, los tres alpinistas -el cámara siguió la ascensión desde abajo- hollasen la cumbre en mitad de la niebla:
-«Lo hemos conseguido. ¡Ahí esta esa nueva vía soñada durante todo un año!».
Pero no fue fácil. El esfuerzo de tener que abrirse paso sobre metros de nieve fresca acumulada y la falta de aclimatación dejaron sus cuerpos maltrechos… A ello hubo que sumar un pequeño accidente: A Eneko le cayó un pedazo de hielo en la cara, que a punto estuvo de partírsela y dejarle sin sentido… Al final todo quedó en un susto y en una herida más aparatosa que grave. Pero, sobre todo, ahí quedaba esa nueva apertura, técnica y difícil, que bautizaron como 'Hanan Pacha' (90º/425 m) en honor a los viejos dioses incas y que alcanza la cumbre del Urus Oeste (5.450 m.)
'EMMOA' (M6/75º/640 m)
Al día siguiente, a pesar de levantarse con calma, decidieron seguir explorando el macizo caminando por la base de las agujas del Urus Oeste. Habría sido mejor descansar del todo, pero estaban muy motivados y necesitaban buscar información para acometer un nuevo objetivo. Dos horas y media de caminata les costó encontrarlo: Deciden intentar abrir una nueva línea en el Urus Oeste III, una aguja escarpada a la que solo se puede acceder escalando, sea cual sea la vertiente elegida...
Tras siete horas de escalada ininterrumpida y navegando por estrechas canales de hielo verticales que surcan una pared de granito espectacular, se alzaban junto a Micher Quito sobre la cumbre de esta montaña, tras abrir otra nueva ruta que esta vez bautizaban como 'EMMOA' (M6/75º/640 m), en honor al museo vasco de montaña.
-«¡Dos vías en tres días! Pero ahora hay que bajarse de aquí…».
Es lo primero que dijeron los alpinistas en la cumbre, ya que la montaña era tan escarpada, que no tenían claro por donde lograrían descenderla…Al final lo consiguieron tirando rapeles de fortuna por un muro de roca desplomado de 100 m que puso a prueba sus nervios, para después descender como pudieron un corredor de hielo vertical. Tan difícil se puso, que a punto estuvieron de descender hacia la vertiente contraria de la montaña -un poco mas fácil técnicamente- dejando al otro lado solo a su cámara Alex Estrada con tiendas, sacos y el resto del material.
Dos días después, y ya al refugio de la civilización en la ciudad de Huaraz, tras informarse sobre la actividad realizada, llegaron a la conclusión que probablemente esta ascensión al Urus Oeste III había la primera a esta montaña de 5.270 metros. Por mas que preguntaron no encontraron información sobre ninguna escalada anterior y ellos tampoco hallaron nada de material abandonado ni en el ascenso ni durante el descenso.
-«Estamos muy contentos con esta exploración a los Urus. Nos llevamos dos aperturas importantes además de probablemente haber hollado por primera vez un pico virgen. También es verdad que el esfuerzo ha sido máximo por la altura, la dificultad de las rutas y las condiciones invernales. Pero hemos apostado a todo y nos ha salido bien. Ahora necesitamos descansar un poco para mirar hacia nuevos objetivos», explica Eneko.
Y es que en apenas quince días han escalado en libre 'Aupa Gasteiz' (7c+/160 m), que abrieron en una expedición anterior, han subido el nevado Huarapasca (5.418 m), han iniciado la apertura de otra vía en roca que todavía no han finalizado, y han abierto dos vías en los Urus. «Ni en nuestros mejores sueños nos habríamos imaginado semejante inicio de expedición…», proclama Iker.
