Alex Txikon y los sherpas equipan hasta 6.200 metros
El objetivo es asegurar el tramo más peligroso de la ruta hasta el campo 2, dormir en él y bajar al CB antes de que entre una pequeña ventana de mal tiempo el lunes
Jornada en el tajo para Alex Txikon y los sherpas que le acompañan en su objetivo de coronar el Manaslu en invierno. El equipo sigue dividido para optimizar el trabajo. Mientras Simone Moro porteaba al campo 1 el material que se había quedado por debajo ayer para retornar luego al campo base y dar por concluida su primera rotación de aclimatación, Alex Txikon y los sherpas iniciaban el equipamiento de la ruta entre los campos 1 y 2. Este tramo es el más peligroso de la ruta al discurrir por un glaciar y entre amenazantes seracs. Tras una larga jornada en la que trabajaron casi hasta que oscureció, Alex comunicaba los logros del día. Habían llegado hasta la cota 6.200 «y mañana seguiremos hasta el campo 2», que según las condiciones de la ruta se ubica entre los 6.400 y los 6.500 metros.
Txikon y Simone Moro han comentado por talkie las incidencias de la jornada y el vizcaíno ha hecho hincapié en algo que ha considerado fundamental: las raquetas. Aun siendo un año seco, se están encontrando un capa de nieve que supera el metro de grosor en algunos puntos. El uso de las raquetas tiene un doble objetivo, por un lado abrir huella con más facilidad, sin hundirse hasta la cintura y por otro asentar mejor la huella abierta, para en un futuro poder discurrir por esos tramos solo con las botas. A esas labores de equipamiento se les ha unido Vinajak, uno de los integrantes de la expedición nepalí que quería intentar el Manaslu en alpino, confirmando así que por un lado renuncian definitivamente al estilo alpino y por otro unen fuerzas al grupo de Alex Txikon y Simone Moro.
El plan del vasco es retornar al CB el mismo lunes tras dormir en el C-2 ya que los partes meteorológicos indican que el lunes entrará un pequeño frente que dejará nieve en el Manaslu hasta el miércoles, aunque las precipitaciones serán mínimas. Un centímetro el lunes, dos el martes y uno el miércoles. Luego, un nuevo periodo de días soleados, aunque con fuertes vientos a ochomil metros.
Además, Iñaki Álvarez y Lur Uribarren subirán mañana domingo a dormir al C-1 para cumplir su primera rotación de aclimatación. Simone Moro, por su parte, subirá también hasta el C-1 alto (5.900), el de los nepalíes, donde instalará una segunda tienda. Aprovechará para fortalecer la huella abierta con raquetas y en función del tiempo que encuentra allí arriba decidirá sobre la marcha si se queda a dormir en ese C-1 o baja al campo base.
Precisamente, era Simone Moro el que comunicaba a Alex la noticia de la muerte de Sergi Mingote, que el vizcaíno acogía con gran tristeza. Txikon conocía personalmente al catalán e incluso le había invitado al Manaslu en vez de acudir al superpoblado K2. Alex le había pasado hasta los tracks de su intento hace dos años. «Es una lástima. Era un gran alpinista y una buena persona. La montaña es así. Te lo da todo, pero también te lo quita. Mando desde aquí un fuerte abrazo a su familia y amigos».
El italiano no conocía personalmente a Mingote, pero el sentimiento en estos casos es de que cae 'uno de los nuestros'. Tras intentar gestionar el rescate a la mayor urgencia posible, por desgracia en vano, Simone incidía en que en estas montañas el peligro se esconde en cualquier lugar. Según le habían relatado desde el CB del K2, en este caso el accidente había surgido al soltarse del rápel que estaba realizando por debajo del C-1, sin que hayan trascendido las causas.
