Menú del día, delicatessen y grandes vinos por copas en una taberna de barrio

A principios del 2019, unos meses antes de que comenzara la pandemia, se hicieron cargo de la Taberna Baste, un pequeño local de apenas 5 mesas situado en la calle Kresaltzu, que se ha convertido en uno de los centros gastronómicos y de ocio más interesantes del entorno. Un local -a finales de este año abrirá de nuevo el restaurante Tudelilla en su ubicación original de la calle Santa Eugenia- en el que ofrecen desayunos y pintxos ricos -sábados y domingos apuestan por las ostras-, todo tipo de embutidos; laterio diverso, desde sardinillas a mejillones, zamburiñas o ventresca; sándwich, hamburguesas y una gran variedad de quesos. Al mediodía, de lunes a viernes, tienen un estupendo menú del día, donde ofrecen desde alubia blanca a lentejas o menestra de verdura, lengua en salsa, falda asada, callos a la vizcaína o pescado del día, desde anchoas a gallo o merluza rebozada.

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Se puede comer auténticas delicatessen como lengua curada, sal ahumada, aceite y pimentón, que tiene un sabor intenso; o coppa ibérica. Están magníficos platos como alcachofas con almejas; foie a la plancha con higos y compotas de frambuesa y fresa; huevo poché con pimientos rojos asados, caldo de carne, picatostes y trufa; y secreto ibérico con crema calabaza, patata azul con romero y salsa chipotle casera, que tiene un ligero toque picante. Para finalizar el festejo una degustación de quesos, que puede ser montagnolo, gouda, stilton, comté o de León de larga curación.

Todo ello en un ambiente agradable, con buena música -algunos sábados organizan conciertos- y unos vinos excepcionales, que pueden tomarse por copas, como Mirabrás, Bat Berri (Itsasmendi), Côte-Rôtie o Escondite del Ardacho.