¿Cómo queda al final la tarifa plana de autónomos?

La tarifa plana se ha renovado como muchos otros aspectos que conciernen a los autónomos en el Real Decreto 28/2018 de 20 de diciembre, para la revalorización de las pensiones públicas y otras medidas urgentes en materia social, laboral y de empleo.

Los trabajadores por cuenta propia que a 31 de diciembre de 2018 se estuvieran aplicando las bonificaciones y reducciones de cuotas previstas en los artículos 31 y 32 de la Ley 20/2007, de 11 de julio, del Estatuto del trabajo autónomo, deberán cotizar obligatoriamente a partir de dicha fecha por contingencias profesionales, no así por cese de actividad ni por formación profesional.

En el caso de que se hubiese optado por la base mínima de cotización que corresponda, la cotización durante los 12 primeros meses inmediatamente siguientes a la fecha de efectos del alta consistirá, a partir del 1 de enero de 2019, en una cuota única mensual de 60 euros, que comprenderá tanto las contingencias comunes como las contingencias profesionales. De esta cuota, 51,50 euros corresponden a contingencias comunes y 8,50 euros a contingencias profesionales.

El resto de los requisitos y condiciones para beneficiarse de la tarifa plana se quedan igual: en el segundo año seis meses con una bonificación del 50%, los siguientes seis meses con una bonificación del 30% de la base elegida, las condiciones especiales para menos de 30 varones y de 35 mujeres y los años de carencia para poder acceder a ella.

Añadamos en último caso que algunas comunidades autónomos añaden beneficios particulares de esta tarifa plana que se suman a los ya dichos. Por eso recomendamos asesorarse primero con expertos para realizar una buena planificación del alta y de los costes que conllevará los primeros años como autónomo.