El skeleton español busca su futuro
Ander Mirambell, tres veces olímpico, lidera un proyecto para formar un equipo de jóvenes talentos para 2022
La historia de Ander Mirambell es la de un decatleta que un buen día decidió cambiar las pistas de atletismo por las de hielo, y ... reconvertirse a una especialidad tan desconocida en España como el skeleton. Apenas tenía conocimientos, pero se lió la manta a la cabeza y en 2005, tras un largo viaje desde Cataluña hasta Innsbruck en su Ford Fiesta -«fue un viaje con miles de contratiempos»-, se presentó en la escuela de pilotaje con un look «made in spain». «Me gasté todos mis ahorros en el casco. La federación me dio un traje de esquí de fondo, y a las zapatillas de atletismo les pegué un rallador de queso para que se parecieran a las mallas de púas de las de skeleton para coger impulso», recuerda divertido.
Esos fueron sus duros inicios pero, a partir de ahí, Mirambell perseveró en su empeño. Jamás se dio por vencido en su intento por llegar a unos Juegos. Lo logró por partida triple. El catalán de Calella ha representado a España en Vancouver 2010, Sochi'14 y Pyeonchang'18. En estos 14 años, Mirambell se ha ganado un nombre en el panorama internacional de esta modalidad que era tan desconocida en España y que él se ha encargado de promocionar a base de esfuerzo y resultados.
Pero le falta algo. Una compañía, una sucesión. Que su trabajo sirva para que el skeleton tenga continuidad en el país una vez que él deje la alta competición. «Lo empecé a valorar a finales de 2017, antes de los Juegos, cuando acababa ya el ciclo olímpico. Hablé con la federación, pero el tema quedó parado y yo me centré en mi trabajo. El año pasado se volvió a retomar el tema, con la idea de afrontar este ciclo olímpico que culmina en los Juegos de 2022. Lo que deseo es dejar una herencia en este deporte. Que todo lo que he aprendido y he trabajado sirva para algo y que haya continuidad en el país. Así lo planteé a la Federación de Deportes de Hielo y así lo han recogido ellos. Se trata de un planteamiento muy serio, ambicioso y a la vez muy bonito», revela Ander Mirambell a este periódico desde Estados Unidos, donde se encuentra preparando la siguiente prueba de la Copa del Mundo en Lake Placid.
El 'casting' se abrió a primeros de noviembre. La federación envió un comunicado en el que abría «convocatoria de plazas para la captación de atletas de la disciplina de skeleton para el próximo ciclo olímpico y formar una escuela de pilotos apadrinada por Ander Mirambell. Se trata de un proyecto ambicioso y con garantías destinado a formar a la futura selección española de skeleton». Se exigieron una serie de requisitos, en cuanto a edad, condición física... «Se buscan deportistas con potencia y velocidad», resumía el comunicado. Y como recuerda Mirambell, al anuncio se presentaron «110 deportistas». «Perdí una apuesta porque yo pensaba que serían 40 o 50», se sincera.
En ese momento, comenzó una criba que dejó en once los potenciales candidatos, que estuvieron trabajando dos días en el CAR de San Cugat, hasta dar con los cinco que formaron el grupo definitivo y viajaron a Innsbruck (Austria). Oriol Roca, Paula Raúl y Claudia Camacho formaron parte de la selección que se desplazó a Innsbruck a realizar la primera concentración de la RFEDH, mientras en St. Moritz se sumaron a la expedición Adrián Rodríguez y Javier Sanz. «Los cuatro primeros son los que han demostrado que están preparados», asegura Mirambell.
Paula Raúl y Adrián Rodríguez, por tanto, son dos de los deportistas elegidos para esta aventura. Ambos proceden del atletismo, en concreto, de la velocidad. La catalana fue tercera en el pasado Campeonato de España de 100 metros vallas, campeona catalana de la especialidad y récord de Cataluña sub'23. «Conocía a Ander. Durante algunos años me decía que me veía con las condiciones y mentalidad de practicar su deporte. Cuando salió esta oportunidad, aunque al principio no me enteré, me decidí a dar el paso. Ahora aquí estoy».
«Yo defino este deporte como una lucha entre la mente y el cuerpo», explica Paula Raúl
La hora de decidir
Aunque parezcan mundos opuestos, skeleton y atletismo tienen un punto en común, por eso la mayoría del grupo procede del tartán. Raúl explica que «buscaba gente explosiva». «En atletismo tienes que tener mucha capacidad mental. Yo lo defino como una lucha entre la mente y el cuerpo. Te genera mucha adrenalina, pero tienes que visualizar mucho lo que debes hacer en cada momento, porque si no te llevas golpes», advierte.
La catalana ha pasado de desconocer el skeleton a vivir ya dos concentraciones y comprobar que se está adaptando de tal manera que «si el proyecto sigue adelante, tendré que decidir». «El atletismo -prosigue- ya sé lo que me aporta, y tenía que saber qué es lo que me ofrece el skeleton. Al principio pensé 'dónde estoy'. Al pasar vallas te puedes caer, pero aquí vas a más de cien por hora, a ras de suelo, y es algo que no puedes parar. Al principio tenía dudas sobre si me gustaba, pero después de Suiza me he dado cuenta de que sí, tiene algo que engancha. El atletismo me gusta mucho, pero lo que puedo vivir con este deporte no creo que pueda hacerlo con el atletismo. Tendré que decidir, pero ahora digo 'por qué no'».
Adrián Rodríguez es otro atleta que se encamina hacia la 'reconversión' deportiva. Con 10.74 en el 100, el castreño se dio cuenta al leer las exigencias de la RFEDH que «las cumplía». «Vi que era una experiencia así que decidí apuntarme. Y para mi sorpresa no tardaron casi nada en decirme que estaba seleccionado para las pruebas físicas», añade.
Así realizó las pruebas y tras no participar en los test de Innsbruck, le llegó la oportunidad de demostrar su adaptación en St Moritz, algo que sorprendió al propio Mirambell. «En muy poco tiempo me puse al nivel de los que habían estado en Austria. Iba con dudas, pero he descubierto que puede ser mi deporte. Cuando noté la velocidad empecé a disfrutar», reconoce Rodríguez.
Ahora, al igual que el resto del grupo, se encuentra a la espera de noticias, aunque tiene claro que «estamos con mucha ilusión de que esto siga, aquí hay unas posibilidades que se abren». «Yo me veo, sí. Si no, no te lo diría y no perdería el tiempo, pero vi que se me dio bien desde el principio, me gustó, todos los días tenía ganas de bajar. Y ahora me pide el cuerpo seguir», insiste.
«Este es un proyecto serio y ya lanzado»
Xavier Cherta, secretario general de la Real Federación Española de Deportes de Hielo, despejó las dudas al asegurar que «tras este casting hay un proyecto muy serio. No es algo frívolo, sino que queremos tener un equipo olímpico. Hemos apostado por empezar de cero, pero con una idea muy clara de ir creciendo. Creemos que la inversión que hacemos es un salto cualitativo, hemos hecho dos concentraciones, y nuestra voluntad es llegar a los Juegos de 2022».
Cherta no deja dudas. «Este proyecto está lanzado. Quedan concentraciones pendientes, pero tenemos clarísimo que va adelante. Ahora mismo tenemos cuatro pilotos y creo que se quedarán, pero es algo que no está cerrado. Es un proyecto muy serio con el que se pueden conseguir resultados».
Los protagonistas
Ander Mirambel
Nacimiento: 17-2-1983. Calella (Barcelona).
Palmarés: Tres veces olímpico en skeleton (2010, 2014 y 2018).
Estudios: Licenciado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte . Tiene un Máster en gestión y dirección de instalaciones deportivas.
Paula Raúl
Nacimiento: 13-8-1996. Manresa (Barcelona).
Palmarés: La pasada temporada fue tercera en el Campeonato de España de 100 metros vallas, y campeona de España sub'23. Su mejor marca fue 13.67 en el Meeting de Madrid.
Skeleton: Ha participado en las dos concentraciones, la de Innsbruck y la de St. Moritz.
Adrián Rodríguez
Nacimiento: 7-11-1996. Castro Urdiales (Cantabria).
Palmarés: Su mejor marca en 100 metros es de 10,74, en el Campeonato de España junior de Castellón en 2014, donde fue tercero.
Skeleton: El cántabro participó en la segunda concentración que se llevó a cabo en Suiza.
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