Badosa ya es la número dos del mundo

Hace exactamente un año Paula Badosa no estaba ni entre las sesenta primeras del ránking mundial. Tampoco había conseguido ningún título en el circuito. Hoy se ha convertido en la número dos del mundo tras vencer a Ons Jabeur en los cuartos de final del Open 500 de Stuttgart, convirtiéndose en la cuarta tenista española en subir al segundo escalafón del planeta tras Arantxa Sánchez Vicario, Conchita Martínez y Garbiñe Muguruza.

Badosa sudó tinta china para amarrar el triunfo. La tunecina Jabeur, número diez de la WTA, tuvo un gran día sobre la arcilla germana y por momentos parecía superior a una Paula que falló más de la cuenta. El primer set se decidió en un 'tie break' de infarto, 11-9 para la española. Sin embargo, la jugadora nacida en Nueva York se desinfló en la segunda manga al encajar un sonrojante 6-1 de la jugadora norafricana.

Ya en la decisiva, Badosa desplegó su mejor juego y rompió dos veces a su rival, a quien superó en largos intercambios. Jabeur se alió en demasía con su dejada, pero Paula le tomó la medida tras sufrir una espectacular bandejita en la red. Dos horas y once minutos después, Badosa se clasificaba para semifinales de Stuttgart, donde se medirá a la bielorrusa Sabalenka, y, lo que es más importante, se proclamaba nueva número dos del mundo.

La ascensión de la afincada en Barcelona es meteórica. Inauguró su palmarés el 22 de mayo del pasado año en la tierra batida de Belgrado. El 17 de octubre se hacía con el Masters 1000 de Indian Wells, su mayor gesta hasta la fecha. Ese hito y un final de campaña asombroso le llevaron a disputar el WTA Finals de Guadalajara, donde llegó hasta las semifinales. Hincó la rodilla ante, a la postre, campeona Garbiñe Muguruza. Ya estaba entre las mejores del mundo. 2022 lo empezó a lo grande al levantar el título en Sídney. En el Open de Australia se quedó en octavos y en Indian Wells rozó revalidar título al caer en semifinales. Unos problemas físicos le llevaron a abandonar en los cuartos de Miami, pero la pupila de Jorge García se ha recuperado a la perfección en Alemania.

Badosa, que rompe la barrera de los 5.000 puntos, abandonó hace un año en Stuttgart, por lo que no defiende punto alguno. Ya suma 200 por haber alcanzado las semifinales y supera en 70 a la nueva número tres del mundo, la checa Barbora Krejcikova, lesionada. Sumaría 320 si llega a la final y 470 si levanta el título el domingo, por lo que tiene una buena oportunidad de abrir brecha con la centroeuropea.

La catalana tiene lejos a Swiatek, que roza los 7.000 puntos y contra quien podría medirse en la final de Stuttgart. Badosa defiende en la gira de tierra las semifinales del Masters 1000 de Madrid, al que acudió con una invitación, y los cuartos de final en Roland Garros. El número uno es el próximo objetivo, aunque deberá esperar.