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El surf es el deporte que más produce esta patología. FOTOLIA
Qué es y cómo evitar el 'oído de surfista'

Qué es y cómo evitar el 'oído de surfista'

Daiana Martínez, del Centro Coda, explica en qué consiste esta patología bastante común entre los amantes del surf y el esquí y qué hacer para no tener que pasar por el quirófano

DAIANA MARTÍNEZ

Lunes, 17 de junio 2019, 22:26

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Se llama exostosis, pero debido a que principalmente los que la sufren son los personas que practican surf, ha pasado a denominarse popularmente como 'oído de surfista'. Una dolencia bastante común que consiste en el crecimiento de uno de los huesos que se encuentra en el conducto auditivo. Éste va tomando mayor tamaño a raíz de estar en contacto con el agua fría (como sucede en el Cantábrico) o el viento a bajas temperaturas durante un tiempo prolongado.

Es benigno pero hace que el conducto auditivo llegue a estrecharse e incluso cerrarse. Además de los surfistas, también se suele dar mucho entre los que practican esquí, además de kayak o deportes acuáticos similares, como el piragüismo.

La exostosis provoca molestias, dolor, infecciones e incluso puede derivar en una otitis aguda. El agua entra muy fácil en el oído por la fuerza de las olas pero querer sacarla es más complicado y tenerla dentro es bastante incómoda. Por eso es habitual ver a los surfistas nada más salir como saltan agitando su cabeza, tratando de sacarla. Si el conducto está casi cerrado es casi imposible hacerlo. Una vez que ya no hay espacio en el conducto auditivo hay que pasar por quirófano. La única solución es la cirugía aunque no siempre se puede realizar ya que es una intervención bastante compleja.

¿Cómo evitarlo? Con la prevención. Es la mejor manera. Y para ello que hay que cuidar los oídos, tratar de que no entre agua o viento frío en su interior, por lo que lo ideal es el uso de tapones. Cuanto más herméticos sean mejor. Cada vez más personas vienen a la consulta a hacerse unos. Entre ellos mismos se corre la voz. Lo interesante es que sean a medida de cada oído, para que no se muevan a no ser que tú mismo te lo retires. Los convencionales suelen caerse y no sellar correctamente el conducto y al final el agua sigue entrando, y con ello el problema se mantiene.

Esta es una patología que depende mucho de las personas. Una la puede desarrollar en poco tiempo y a otros pese a estar surfeando toda la vida no la llegan a padecer. La mejor forma de saber si estás en un bando o en el otro es hacerte un examen para ver si ese hueso está bien o se está empezando a estrechar el canal.

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