El poeta claroscuro
La vida del hombre ·
. Frente a sus «equivocaciones, errores, amores y dolores», Neruda oponía su fidelidad al comunismo y a la lucha por el pueblo chilenoLuisa Idoate
Sábado, 9 de septiembre 2023, 00:05
Poeta nato, comunista convencido, hedonista confeso. Pablo Neruda (1904-1973) vive para la poesía y convierte la vida en un poema. Canta al amor, la ... muerte, el olvido; a los sufridos, oprimidos, explotados; a lo trascendente, lo nimio y lo banal. Es cónsul, senador, embajador, fugitivo y exilado, pero no víctima. «No nací para sufrir. Gozo con todos los espectáculos de la vida». Convierte sus casas en jugueterías. «El hombre que no juega perdió para siempre al niño que vivía en él y que le hará mucha falta». Atesora en ellas botellas, mascarones de barco, caracolas, máscaras, naves en miniatura.
También colecciona amores. Se dice monógamo, pero solapa tres esposas y muchas amantes. Ama el mar. Adora el marisco, los vinos, los viajes. La izquierda le acusa de burgués y sibarita; la derecha, de agente comunista. «Nadie puede ignorar mi fidelidad a mis ideas, a mi pueblo, a mi combate y a mi lucha», rebate. Se admite discordante. «He escrito cosas tan contradictorias que de todas partes se me puede agarrar para despedazarme. He tenido muchas equivocaciones, muchos errores y amores, muchos dolores. Esto es parte de la vida de un hombre. Yo no soy sino un hombre».
Tiene dos meses cuando muere su madre, Rosa Basoalto. A Neftalí Ricardo Reyes, su nombre, lo cría Trinidad Candia Marverde. «Oh dulce mamadre -nunca pude decir madrastra-». Su padre no quiere que sea poeta y le rompe lo que escribe. Pero con 13 años publica 'Entusiasmo y perseverancia' en 'La Mañana' de Temuco (Chile), donde se cría; y a los 17 gana el premio de la Federación de Estudiantes de Chile con 'La canción de la fiesta'. Para evitar roces familiares, adopta el seudónimo que legaliza en 1946: Pablo Neruda. Dicen que toma el apellido del poeta checo Jan Neruda o de la violinista moraviana Wilma Neruda. Con 19 años publica 'Crepusculario' (1923) y con 20 se consagra con 'Veinte poemas de amor y una canción desesperada' (1924). Los dedica a su primer amor de Temuco, Teresa León Bettiens, 'Terusa', que es la Marisol de la canción desesperada, y a compañeras de la Escuela Pedagógica de Santiago como Albertina Azócar.
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«Vampiresa de tres kilos»
En 1927 es cónsul en Rangoon (Birmania). Tiene poco trabajo, mucho tiempo para escribir, un sueldo y un romance con Josie Bliss. Viaja por Oriente. Se casa en 1930 en Java con María Antonieta Hagenaar, Maruca. El trabajo lo lleva a Singapur y Argentina. Ella es «ajena al mundo de las artes y las letras». No encaja con la bohemia que frecuenta Neruda, que firma 'Residencia en la tierra' (1933).
Federico García Lorca, Miguel Hernández, Antonio Machado y Rafael Alberti son su cuadrilla en Madrid, su nuevo destino en 1934, donde nace su única hija. Presume ante Aleixandre. «¡Ven, Vicente, ven! Mira qué maravilla. Mi niña. Lo más bonito del mundo». Malva Marina padece hidrocefalia. Poco después escribe a Sara Tornú: «Mi hija, o lo que yo denomino así, es un ser perfectamente ridículo, una especie de punto y coma, una vampiresa de tres kilos». Se duele porque «había que darle comida con sonda, con cucharita, con inyecciones y pasábamos las noches enteras, el día entero, la semana, sin dormir, llamando al médico».
Al estallar la Guerra Civil se separa de Maruca, que huye a Montecarlo con Malva Marina, le pide una pensión que nunca llega y malvive con trabajos precarios y de la caridad. Aunque la Fundación Neruda asegura que le pasaba una mensualidad, muchos le reprochan dejar morir a su hija en 1943 en Gouda (Holanda), ocupada por los nazis, divorciarse a distancia de su madre sin ayudarla a huir y casarse con Delia del Carril, 'La hormiguita'. Para algunos, al poeta no le interesa la presencia de Maruca en Chile, donde vive, porque el país no reconoce su divorcio y sería acusado de bigamia.
«No nací para sufrir», decía. «Gozo con todos los espectáculos de la vida»
Compromiso político
Tras el estallido de la contienda española y el asesinato de su amigo Lorca, en 1936, apoya a los republicanos y pelea contra el franquismo. Huye a París, publica 'España en el corazón' y crea el Grupo Hispanoamericano de Ayuda a España, que le cuesta el cargo consular en Madrid. En 1939, lo nombran cónsul en París para la emigración española en Francia. Evacúa a Chile a 2.000 exilados republicanos en el barco 'Winnipeg' que parte de Pauillac el 4 de agosto, y escribe: «Que la crítica borre toda mi poesía, si le parece. Pero este poema, que hoy recuerdo, no podrá borrarlo nadie».
En 1945 es senador y miembro del Partido Comunista de Chile. Se enfrenta al presidente Gabriel González Videla, que lo ilegaliza en 1948, con 'Carta íntima para millones de hombres' publicada en 'El Nacional' de Caracas. Lo desafueran, ordenan su captura. «Se busca a Neruda en todo el país», dice en portada 'El Imparcial' . Pasa a la clandestinidad y huye a caballo por los Andes. Acaba en París, donde Picasso le aloja y ayuda a conseguir el estatus de refugiado. Vuelve a Chile en 1952, al finalizar su persecución.
Un reciente estudio forense concluye que lo envenenaron con toxina botulínica por orden de Pinochet
Es doctor 'honoris causa' por la Universidad de Oxford (1965). Obtiene el Nacional de Literatura de Chile (1945), el Lenin de la Paz (1953) y la Orden del Sol de Perú (1966). Gana el Nobel de Literatura en 1971. Su mayor emoción es ser leído por los mineros del cobre, los ovejeros de Magallanes, los presos. Muere en Santiago el 23 de septiembre de 1973, oficialmente por cáncer de próstata. Pero un reciente estudio forense concluye que lo envenenan con toxina botulínica por orden del general Augusto Pinochet, que escolta su cortejo fúnebre tras derrocar y matar doce días antes a su amigo y presidente Salvador Allende. Roberto Alifano lo recuerda. «Fue impresionante el velorio, la marcha política más increíble que vi en mi vida. Cuando salió éramos 15 o 20 personas y al llegar éramos tres o cuatro mil. Y era gente del pueblo chileno, que se iba sumando para despedir a su poeta».
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