Un 'Don Pasquale' moderno que tocará la fibra sensible

Este sábado, a las 19.00 horas en el Euskalduna, se inaugura la programación lírica con un montaje que firma escénicamente el empresario Emiliano Suárez, conocido por adaptar clásicos como 'La Bohème' y 'Rigoletto' a espacios industriales, alternativos o 'underground'. Le acompañan profesionales de la talla del escenógrafo Alfons Flores y el iluminador David Picazo. Su mujer, la influencer y referente de moda Carola Baleztena, se ha encargado del vestuario en colaboración con Scalpers. «Estoy seguro de que la propuesta de Emiliano es como la propia música, fresca y jovial, como si se descorchara una botella de champán», se felicitaba este martes Cesidio Niño, director artístico de la ABAO, junto a Javier Benito, director de Telefónica Euskadi, que conmemora su centenario y patrocina la primera función.

La producción se presenta con un reparto de postín, con el bajo-barítono Simón Orfila (Don Pasquale), la soprano María José Moreno (Norina), el tenor Francesco Demuro (Ernesto) y barítono Damián del Castillo (Malatesta), acompañados por Euskadiko Orkestra a las órdenes de Sesto Quatrini. Se cuenta, además, con el aliciente de que Simón Orfila y Maria José Moreno cantan por primera vez en esta ópera bufa de Donizetti, que tiene mucha más enjundia de lo que parece.

'Don Pasquale' arranca medias sonrisas y no tanto carcajadas, al compás de una partitura que no da respiro a los cantantes. Las intervenciones del coro, concentradas en el tercer acto, también le dotan de originalidad y mucho brillo. «El bel canto es lo más difícil, porque las intensidades y dinámicas no están claras al detalle. Tienes que tomar decisiones muy importantes constantemente y acompañar a las voces, sin olvidar que el diapasón ha subido, es decir, los cantantes deben cantar ahora más agudo que antes», explicaba el maestro Sesto Quatrini, que debuta en la temporada de la ABAO.

Los intérpretes se mostraban este martes satisfechos con los ensayos y la evolución del trabajo conjunto. El bajo-barítono menorquín Simón Orfila reconocía sentirse «totalmente realizado con un personaje que hace reír al público» y la soprano granadina María José Moreno también recalcaba la faceta intrigante y chispeante de su papel, que ha vivido «como un reto». Igualmente entusiasta se declaraba el tenor italiano Francesco Demuro, que recientemente ha cantado el rol de Ernesto en Verona, y sabe que su personaje no solo exige una dosis importante de almíbar sino ligereza y facilidad para los agudos. «Es un rol complicado», subrayaba con tono serio, pero aliviado porque la confianza entre los cantantes es absoluta.

Entre las curiosidades del montaje, llamará la atención la inclusión de una figura que glosa las escenas y hasta recita un soneto de Lope de Vega. Todos los textos son propuestas del actor todoterreno Pedro Mari Sánchez, que además de encarnar a ese sujeto extra, se mete en la piel del notario de la trama y cantará con voz impostada.

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