Zinegoak apuesta por mil maneras de vivir y amar
El amor de una mujer transexual y otra cisgénero protagoniza el póster del festival gaylesbitrans de Bilbao
Dos mujeres abrazadas en una bañera rebosantes de felicidad y amor. El póster de Zinegoak, que celebrará su 17 edición del 24 de febrero al ... 8 de marzo, es una fotografía en blanco y negro perteneciente al libro 'Vera y Victoria', publicado en 2016 en la editorial André Frère Éditions. Su autora, la fotógrafa Mar Sáez, siguió durante cuatro años la relación entre las protagonistas. «El día que Vera besó por primera vez a Victoria le confesó que era transexual. Fue en un parque. No cambió nada», describe la artista murciana. «Durante los cuatro años que pasaron juntas se amaron como nunca antes amaron a nadie. En esa etapa de sus vidas, Vera y Victoria dejaron de ser dos personas para convertirse en una».
El Festival Internacional de Cine y Artes Escénicas Gaylesbitrans de Bilbao ha elegido esa imagen en el año que adopta como lema «más de mil maneras de ser, sentir, amar y vivir». «Queríamos mostrar que cuando hablamos de diversidad sexual lo hacemos de muchas más cosas que de la orientación sexual de las personas», precisa Pau Guillén, director del certamen. «También lo hacemos de la identidad de género o de la expresión de género, entre otras cosas. El trabajo de Mar Sáez nos ofrece una forma muy optimista y directa de poder abordar todas estas cuestiones a través de una imagen de gran calidad artística».
Lejos de apostar por la transgresión, Zinegoak pretende llegar a un público generalista «que muchas veces no está sensibilizado con estas cuestiones». Se trata de llamar la atención para reflexionar sobre una realidad y no tanto de provocar con imágenes «que ya han dejado de ser invisibles». El póster de Zinegoak muestra, a priori, a dos mujeres lesbianas. Pero al profundizar en la identidad sexual de las protagonistas encontramos a una mujer trans y a otra cis (cisgénero o cisexual, es decir la persona cuyo género asignado al nacer e identidad sexual concuerdan).
Polémica
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Un póster censurado en Facebook. Este periodista ha intentado en vano colgar el póster de Zinegoak en Facebook. «Tu publicación infringe nuestras normas comunitarias sobre desnudos o actividad sexual», alerta la red social, a pesar de que la imagen no muestra ni siquiera unos pechos. El propio festival ha tenido dificultades para mostrar la fotografía de Mar Sáez en su cuenta oficial. «Primero nos han bloqueado durante 24 horas, aunque después han revisado la publicación y nos han dejado mostrarlo», se queja el director Pau Guillén. «Creo que son muy sutiles a la hora de invisibilizar imágenes con cuerpos femeninos, porque estamos teniendo muchas menos interacciones que otros años al descubrir el cartel. Nada que ver con la respuesta que estamos teniendo en Instagram».
Etiquetas necesarias
«Muchas veces nos preguntan si son necesarias tantas etiquetas, hasta puede ser contraproducente tanta terminología. Nuestra idea es justo la contraria, eliminar todas las etiquetas y que cada cual haga su vida como considere. Pero por desgracia siguen haciendo falta para poder identificarnos y para que toda la sociedad pueda visibilizar las distintas maneras que tenemos de ser, amar y expresarnos», añade Guillén.
Zinegoak ha recibido cerca de 500 obras entre largometrajes, documentales y cortos, destacando la gran cantidad de ellos que abordan la realidad de los transexuales. La extensión de las actividades del festival que se celebra en los meses de marzo y abril crece hasta alcanzar el medio centenar de localidades, convirtiéndose así en una de las actividades cinematográficas con mayor cobertura de toda la geografía vasca.
«Más que crecer en busca de más espectadores ahora estamos intentando vincularnos a otros festivales internacionales en el marco del programa Media de la Unión Europea», adelanta Pau Guillén. Zinegoak, que supera en cada edición los 10.000 espectadores con un presupuesto de poco más de 100.000 euros, se celebra siempre en fechas próximas a la Berlinale para intentar atraer algún invitado y ahorrarse vuelos transoceánicos. El certamen alemán es pionero en la concesión del Premio Teddy a filmes con protagonistas homosexuales.
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