Trump busca el favor del Hollywood que abominó de su primer mandato

La juventud no ha primado en su decisión. Mel Gibson (69 años), Jon Voight (86) y Sylvester Stallone (78) han sido los elegidos. «Yo haré lo que ellos me sugieran (...) Y, como en Estados Unidos, ¡será nuevamente la era dorada en Hollywood!», aseguraba el mandatario esta semana. Empecemos con el protagonista de Mad Max, que hace muchos años que proporciona más titulares por sus conductas y declaraciones que por sus películas. Kamala Harris no le gustaba demasiado: Tenía «el coeficiente intelectual de un poste de valla» y «un historial miserable».

Su alcoholismo, sus creencias católicas ultraconservadoras –pertenece a una congregación que desdeña las reformas del Concilio Vaticano II– heredadas de un padre racista que niega el Holocausto nazi, su antisemitismo –«jodido judío, los judíos tienen la culpa de todas las guerras del mundo», profirió cuando le detuvieron beodo en 2006– y las acusaciones de malos tratos parecían agua pasada. Pero no, Mel Gibson también ha descubierto en el podcast de Joe Rogan que es un 'magufo' al asegurar que sus amigos se han curado del cáncer con un producto para desparasitar perros. «No creo que exista nada que afecte a la humanidad, que no tenga una cura natural. No puedo probarlo, pero lo creo», afirmó el ganador de cinco Oscar con 'Braveheart'.

Jon Voight ya apoyaba incondicionalmente a Trump desde hace muchos años. El padre de Angelina Jolie, con quien la actriz estuvo muchos años sin hablarse, defiende sin fisuras a Israel y tachó de antisemitas a Javier Bardem y Penélope Cruz por firmar un manifiesto «contra el genocidio de la población civil palestina». De joven, Jolie acusó a su padre de abusos psicológicos y sexuales, y éste, a su vez, la respondió que ella practicaba el incesto con su hermano James cuando eran niños.

En cuanto a Sylvester Stallone, su apoyo a Trump, a quien considera «un segundo George Washington», se ha visibilizado en mítines y galas. El actor llega a comparar al político con su personaje más icónico, el boxeador Rocky Balboa, y hasta con Jesucristo. Stallone rechazó en 2016 un ofrecimiento de Trump para ostentar un cargo en el Fondo Nacional de las Artes. El protagonista de 'Rambo' se veía más en otra oficina gubernamental, la que atiende a los veteranos de guerra. «Nadie en el mundo podría haber conseguido lo que él ha conseguido», ha piropeado al magnate que gobierna EEUU.

El nombramiento de Donald Trump ha sorprendido a los agraciados tanto como al resto del mundo. En un comunicado distribuido horas después por su publicista, Gibson reconoció que no sabía nada: «Recibí el tuit al mismo tiempo que todos ustedes y quedé igual de sorprendido. Sin embargo, atiendo la llamada». El actor acaba de perder por culpa del fuego su mansión en Malibú, valorada en 14,5 millones de dólares. «¿Existe alguna posibilidad de que el puesto venga con la residencia de un embajador?», bromea Gibson en el comunicado.

Nadie parece recordar ya lo simpático que caía Trump en Hollywood, donde tiene hasta su propia estrella en el Paseo de la Fama. 'Solo en casa 2', 'Zoolander' y las series 'El príncipe de Bel-Air' y 'Sexo en Nueva York', entre otras, han contado con cameos del multimillonario, que allanó su carrera política en el programa 'The Apprentice'.