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Casas en Urdaibai (chalet)
Dos casas en una: el chalet de revista de un padre y su hijo en UrdaibaiEl dueño de la vivienda vendió su empresa y decidió trasladarse a la zona de Gautegiz Arteaga para disfrutar de la jubilación en plena naturaleza
El caserío, esa joya y pieza clave del patrimonio arquitectónico del País Vasco, no pasa desapercibido fácilmente. Se caracteriza por su construcción tradicional y por el protagonismo de la madera, tanto en la fachada como en el interior. En esta ocasión, la fusión de tradición y modernidad da lugar a un resultado espectacular. HOBA Studio ha reconstruido un baserri del siglo XIX en Gautegiz Arteaga, un entorno privilegiado de Bizkaia, situado en la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, donde el olor a mar y el verde paisaje captan los cinco sentidos. El dueño de la vivienda vendió su empresa y decidió trasladarse a esta zona para disfrutar de la jubilación en plena naturaleza.
Se trata de un proyecto que ha sabido combinar a la perfección comodidad y estilo en un entorno natural. Jon Barandika, Daniel Aragón e Ibon Laderas se han enfrentado a un gran reto: demoler, desplazar y sustituir la pieza original para convertirla en una vivienda adaptada a los nuevos tiempos: un caserío innovador y perfectamente integrado en el entorno. «El planteamiento era reubicarlo en una parcela y orientarlo a las mejores vistas con la premisa de cumplir la normativa del patronato. Nuestra intención ha sido mostrar una versión nueva del caserío», cuenta Jon.
La vivienda mantiene acabados como la piedra, la madera y el raseo y elementos compositivos como amplios balcones, pero con técnicas nuevas y con un toque actual y diferente. Además del proceso de demolición y sustitución, uno de los objetivos ha consistido en dividir el espacio para crear dos viviendas: una para el padre, que vive allí; y otra para el hijo, surfista, que de vez en cuando va de visita. La casa tiene alrededor de 410 metros y la reconstrucción ha respetado el concepto volumétrico de la estructura original. «Cuando hicimos la reforma, nos encargamos de crear un único volumen manteniendo los materiales propios del entorno», explica el arquitecto.
HOBA Studio ha apostado por cubiertas inclinadas y una atractiva fachada simétrica conservando la esencia tradicional en el exterior. Sin embargo, en el interior de la vivienda se respira modernidad en cada rincón. Los tonos grises, blancos y beiges se funden para crear sensación de calidez. «Si utilizamos piezas cerámicas de color grisáceo en tonos fríos, como contrapunto solemos meter colores cálidos a través de la madera, por ejemplo».
Estilo minimalista y 'boho-chic'
El caserío consta de una vivienda matriz, la del padre; y de una trasera, la del hijo. Tienen estilos diferentes, pero mantienen el equilibrio y la sintonía mediante una línea 'boho-chic'. «Las decoraciones se caracterizan por ser minimalistas, pero el hijo se inclina más hacia una decoración rústica». El equipo del estudio de arquitectura ha aprovechado la gran superficie del terreno para jugar con las dobles alturas en la zona de la cocina y el salón. «Nuestro objetivo es definir bien los espacios y que se entiendan, pero además, hay que saber solucionarlos bien», dice Jon.
La luminosidad también destaca en la vivienda. Los grandes ventanales, situados en los laterales de la fachada, dejan ver los inicios de las marismas y un paisaje verde como telón de fondo. «Nos interesaba que las vistas y la luz natural fueran protagonistas en todo momento. La sensación dentro de la casa es súper especial», apunta el emprendedor.
Los arquitectos han sabido combinar de manera muy sutil los diferentes materiales para crear una línea fina y minimalista en cada espacio. Han jugado con las piezas cerámicas y la madera en tonos claros para conseguir un resultado final acogedor y agradable sin descuidar la esencia de los anfitriones. La vivienda del padre mantiene líneas rectas y escaleras metálicas con una cocina moderna de Santos Arriandi; y el hijo ha apostado por un toque más rural con cestas de mimbre, mesa de carpintero, escaleras de madera y una cocina de gama alta de Ikea, por ejemplo.
HOBA Studio ha creado una nueva versión de caserío apostando por la innovación, y sobre todo, sacando el máximo partido al entorno privilegiado en el que se encuentra. «Este proyecto ha sido la metamorfósis de un caserío», concluyen.
