Gardeazabal: «Primark nos va a castigar duro»
El dueño de la sastrería Derby toma el relevo de Aitor Elizegi y cree que el comercio debe ser «más sexy porque la gente desvía el gasto al ocio»
Gardeazabal, dueño de Sastrería Derby, creada en 1948, ha logrado el apoyo mayoritario de sus colegas para dirigir bilbaoDendak.
- Bromeaba sobre si tenía que darle la enhorabuena o el pésame.
- Ja, ja. No, siempre es un orgullo que te reconozcan con un cargo elegido básicamente por comerciantes. Pero la responsabilidad tan grande de representar a tantos comercios...
- ¿Cuál es su principal propósito?
- El comercio tiene infinidad de problemas. No es un problema, ni dos. Y, encima, muchas veces las soluciones no están en los comercios.
- ¿Dónde las buscan entonces?
- En instituciones de 'alto standing'. Internet es el gran problema, Si la gente supiera a quién paga y quién fabrica lo que compra, el tema cambiaría. ¡Esa es nuestra labor!
- ¿Cuál?
- Que nosotros creamos riqueza en la ciudad y damos un servicio que ellos no dan. Hay que sacar menos las tiendas a la calle y que la gente entre más en ellas. Y el comercio tiene que ser mucho más sexy.
- ¿Cómo?
- Nosotros tuvimos una época de estar sentados en caja. El cliente entraba y compraba, y nosotros cobrábamos encantados de dar buen servicio y calidad. No había que esforzarse para meter a la gente dentro.
- Eso se acabó hace mucho.
- ¡Tenemos que recuperar a la gente para que consuma o, por lo menos, entre en nuestras tiendas!
- ¡Y compre!
- Exacto. El servicio es nuestra arma. La única que tenemos. Y para eso hace falta una buena profesionalización y mucha preparación. Es una de las labores de bilbaoDendak: preparar bien a la gente, ya sea en idiomas, en atención al público...
- ¿Se vende poco?
- Las ventas están muy bajas. El primer trimestre ha sido muy duro.
- ¿Perjudica más el 'low-cost', las grandes cadenas o que el gasto se desvía al ocio?
- Lo primero es que el gasto se ha desviado. Todos tenemos amigos que sabemos lo que compran y dónde y resulta que tienen un móvil de 1.500 euros y un coche de 60.000. ¡Que está muy bien! ¿Eh? El vestir ha quedado relegado.
- Ha perdido atractivo.
- Muchísimo. La gente ya no viste tanto. Más se tapa que se viste.
- Representa a grandes, como El Corte Inglés, y a pequeños comercios. ¿Es posible la convivencia?
- Sin duda. El Corte Inglés lleva desde 1965 y hemos convivido 'es-tu-pen-da-men-te'. Lo mismo que Zubiarte, un centro grande pero lleno de pequeños negocios. Eso hay que defenderlo. ¡Faltaría más!
«Mejor que el de Madrid»
- En tiempos duros, ¿es más fácil que el grande se coma al chico?
- Es ley de vida. Pero sí es cierto que aquí tenemos que ser todos conscientes de que cuando abra un macrocentro (Primark) como el que va a abrir en la plaza Circular...
- ¿Sí?
- Está bien porque da a la ciudad un movimiento comercial, pero hay que ver lo que va a cerrar y lo que va a castigar. Y eso lo tenemos que valorar tanto bilbaoDendak como el Ayuntamiento y los demás comerciantes. ¿Cómo vamos a competir con eso? ¡Es muy difícil!
- ¿Los comerciantes saben estar a la altura?
- La mayoría, sí. Prueba de ello es que todavía hay muchísimo comercio de enorme calidad. Mucho mejor, incluso, que el de Madrid.
- Pero Bilbao ya no es lo que era con tantos cierres históricos.
- Es que, aparte de la convivencia con las grandes superficies, tenemos un gran enemigo..
- ¿Cuál es?
- Yo lo llamo el enemigo inmobiliario. Cuando las ventas están como están y tienes un local en propiedad, los cantos de sirena llegan. Gracias a Dios, aguantamos, pero entiendo que haya gente a la que le lleguen con un talón y diga '60 años, sin madrugar y voy a ganar el doble'... La decisión está clara.