Las nuevas políticas de alimentación ecológica se piensan en Orduña
Municipios de todo el país que apuestan por iniciativas sostenibles en torno a la producción de comida se reúnen desde hoy en la ciudad vizcaína
La Red de Municipios por la Agroecología ha inaugurado hoy en Orduña su encuentro anual. Esta asociación que engloba a diversas localidad de todo el estado, tiene por objetivo ayudar a las administraciones locales a «construir sistemas alimentarios sostenibles» que garanticen el acceso a comida saludable para toda la población. Desde hoy hasta el sábado habrá momentos de debate, reflexión y puesta en común de políticas enfocadas hacia una transformación de la producción alimentaria que tenga la ecología como piedra angular.
Orduña ha cogido el testigo de Córdoba como sede de este encuentro. La ciudad vizcaína ha realizado avances significativos en la materia en los últimos años. La actualización de los pliegos de contratación del comedor escolar para incorporar «criterios de aprovisionamiento ecológico, de proximidad y locales», o la puesta en marcha del centro de transformación cárnica Belardi son algunos de estos hitos.
Actualmente, la Red esta formada por 37 municipios de comunidades como Cataluña, Madrid, Euskadi, Valencia o Andalucía entre otras, así como por diversas organizaciones. Durante las jornadas habrás mesas redondas que tratarán temas como el desperdicio alimentario, la economía circular o el papel de las entidades supramunicipales en las políticas alimentarias. También servirá para que los representantes de los municipios llegados a Orduña pongan en común las diferentes iniciativas que han implementado en sus lugares de origen, y que el encuentro se convierta así en fuente de inspiración para todos.
Un ejemplo es Aínsa, localidad aragonesa de la provincia de Huesca. «Nosotros hemos construido un matadero ecológico municipal que está gestionada por una ONG medioambiental», explica su alcalde, Enrique Pueyo. «Todos los residuos de ese matadero los llevamos a un comedero de aves necrófagas, donde se alimentan los quebrantahuesos y los buitres», relata el primer edil. De esta forma Aínsa ha conseguido cerrar el círculo de la alimentación. «Los ganaderos vienen a matar a kilómetro cero, esa carne se puede vender en el territorio, lo que aumenta la rentabilidad de las explotaciones y damos uso a los deshechos», destaca Pueyo.
Durante el encuentro, algunas localidades vascas como Bilbao o Vitoria presentaron también proyectos que están llevando a cabo. En el caso de la capital vizcaína fue el de los huertos municipales, una serie de parcelas repartidas por cuatro barrios, y cedidas a vecinos, en ciertos casos de colectivos desfavorecidos. Estas personas reciben además formación sobre cultivos ecológicos para aplicar en los propios huertos. En cuanto a Vitoria, la ciudad se ha marcado el objetivo de incrementar su «autosuficiencia alimentaria» y ha desarrollado diversas iniciativas como la recuperaciones de variedades de semillas o la mejora de la nutrición en sus comedores escolares.
«Debemos aprovechar cada conversación, cada momento compartido para seguir reforzando esta red de municipios que trabajan juntos por una alimentación más justa y cercana», ha señalado el alcalde de Orduña, Iker Santocildes, durante la presentación del evento. El primer edil ha expresado el deseo «de que este encuentro nos motive para volver a nuestros municipios con ganas de seguir mejorando» y la convicción de que «cuando los pueblos se organizan para cuidar su tierra construyen democracia salud y dignidad».
En representación del Ministerio de Consumo y Agenda 2030 ha participado David Perejil. El director general ha hecho hincapié en la «emergencia climática» y los retos que plantea, especialmente hacia los ganaderos «que son quienes alimentan al mundo y quienes son al mismo tiempo más vulnerables hacia sus consecuencias». Por parte del Gobierno vasco ha intervenido la consejera de Alimentación y Desarrollo rural, Amaya Barredo, que ha hablado sobre las políticas agrarias europeas y la propuesta que Euskadi ha realizado en este aspecto. «Creemos que debe ser una política agraria familiar, sostenible y focalizada en las personas que trabajan en el sector». Barredo también se ha referido a la nueva ley sobre este ámbito que «se llevará a tramitación parlamentaria a comienzos de 2026».
