Mercabilbao salva sus productos gracias a cámaras frigoríficas y generadores

Por Mercabilbao pasan al año 260.000 toneladas de alimentos y en el centro trabajan 1.200 personas en las secciones de frutas y pescados. En su interior, operan más de un centenar de empresas. Si el apagón que se produjo este lunes se hubiera prolongado más horas, podría haber tener consecuencias devastadoras para la conservación de productos perecederos. Sin embargo, los vendedores cuentan con unas cuantas horas de margen para evitar que todo se eche a perder. «Mientras las cámaras frigoríficas permanezcan cerradas, podemos mantener el género durante más de medio día», explica Alma Crespo, presidenta de la Asociación de Mayoristas de Pescados.

En el caso de los productos del mar, los lunes están cerrados y no tienen actividad, por lo que la afección en el sector fue menor que en el de las frutas. Y aunque algunos tenían excedente de jornadas anteriores, pudieron almacenarla sin riesgo durante el tiempo en el que se prolongó el corte de suministro. Unido a esto, los puestos están abiertos desde las 5.30 horas hasta las ocho y media de la mañana, por lo que «no nos hubiera pillado con el género fuera porque ya estaría todo el pescado vendido».

Las frutas aguantan las ventas hasta las diez de la mañana, pero tampoco ellos se enfrentaron a un escenario caótico y tomaron cartas en el asunto: «Algunos mayoristas tienen generadores propios y pudieron tirar de ellos las horas en las que no hubo electricidad», apunta Rafa Torres, presidente de la asociación de mayoristas de fruta.

No se produjeron grandes momentos de tensión porque «enseguida supimos que el fallo era generalizado en España, Portugal, Andorra y algunas zonas de Francia; otra cosa hubiera sido que la avería hubiera sido nuestra y la red privada que tenemos se quedara sin funcionamiento». En este sentido, señala que «no quedó otra que esperar a que se reparase, porque poco podíamos hacer».

Según apuntan fuentes autorizadas de Mercabilbao, el servicio se restableció de forma completa en las instalaciones «a las 20.43 horas». El centro cuenta con grupos electrógenos, que permiten mantener la actividad «en caso de que el suministro vuelva a fallar». Asimismo, las empresas que operan en el interior «adoptaron, cada cual, las medidas que estimó necesarias».

A pesar de las circunstancias, «pudimos continuar operando con relativa normalidad, sin que se produjeran alteraciones significativas en las actividades del mercado, tanto de distribución como de recepción de mercancía». El género ha llegado al centro sin problema este martes «salvo algunos artículos de Galicia por la imposibilidad de etiquetarlos», precisan en Mercabilbao.