Bilbao multiplicará por cinco la seguridad privada

Prosegur, que da empleo a unas 1.500 personas en Euskadi pero que necesita «muchos más trabajadores», se encargará de esta parte del operativo. El dispositivo ha sido básicamente diseñado por la Ertzaintza y la Policía local de Bilbao. Serán «varios miles» de efectivos. La empresa, que colabora desde hace tres décadas con el Athletic, lleva preparándose para este evento desde la final de la Champions femenina del año pasado, cuando movilizó a 300 profesionales.

Su trabajo durante estos días consistirá en ponerse a disposición de los mandos policiales que dirigirán las operaciones y, a grandes rasgos, se centrará sobre todo en garantizar la seguridad dentro de la explanada y en el estadio. La base -explica González- es centrarse en la «seguridad preventiva». Una de sus principales funciones se encontrará en los diversos controles de acceso que se activarán para evitar que se introduzcan objetos prohibidos y en las aglomeraciones. También se encargarán de la seguridad dentro del estadio. Aquí habrá diversos equipos. Uno de ellos serán los vigilantes de «acción rápida», cuya función será evitar invasiones en el campo. Pero también patrullarán por los vomitorios y controlarán los accesos a las zonas restringidas como vestuarios y palcos de autoridades.

Pero la ampliación de la seguridad privada no se limitará sólo a la zona de San Mamés. También habrá refuerzos en el Palacio Euskalduna, en el Guggenheim y en el Metro. Prosegur ha recurrido a vigilantes especialistas en grandes eventos de diversas comunidades.