La bilbaína Yolanda Aberasturi, mejor peluquera de España

– ¿Las tendencias en peluquería son un visto y no visto cada año?

– Hay algún cambio, pero siempre son pequeños detalles. Más o menos rizado, mayor o menor volumen, pequeños y pocos detalles, en definitiva. Sin embargo, todos juntos conforman, con el tiempo, un gran cambio.

– ¿Cambian cada temporada?

– Insisto: nunca son drásticos de una temporada a otra.

– ¿Qué le pide la clientela?

– Lo primero que te preguntan en cuanto entran es '¿Qué me harías?' '¿Qué me favorece?' Es lo más importante. Vivimos la época del visagismo (estudio de la líneas, el volumen y las formas del rostro). Colocas primero a las mujeres frente al espejo, luego las analizas, pormenorizas e investigas con ellas, y finalmente llega el corte de pelo. El rostro marca.

– Una vez que se hacen con un estilo, ¿las mujeres se dejan llevar?

– Hay de todo. Ahora es la época más agitada del año. La gente está de vuelta de vacaciones y desea un cambio porque empieza el otoño. Sucede igual con la ropa, que varía la vestimenta.

– ¿Por dónde van los cambios este año?

– ¡Por lo que veo y estamos haciendo vuelven los flequillos! Están muy de moda y caen de cine a quienes les favorecen, claro.

– ¿No es para todas?

– Hay que buscar un rostro que no acentué una nariz larga y una cara excesivamente delgada. A la persona que favorece, le favorece muchísimo. Pero no a todo el mundo. Como tengas la nariz larga y una cara muy marcada, cuidado con el flequillo.

– Vaya cómo se las juega el flequillo.

– Además de llevarse mucho, está el pelo rizado y muy alborotado. Desenfadado, muy loco... ¡Eso es tendencia total!

– En cuestiones capilares, ¿influye mucho la edad de la clienta? Según van cayendo los años, ¿se opta por estilos más conservadores?

– Yo creo que no. Impera más el estilo que la edad. Priman, sobre todo, el espíritu, el ánimo y la imagen de cada mujer. Hay gente joven clásica y gente mayor bastante arriesgada. En ocasiones, las más atrevidas son las de mayor edad.

– ¡Bravo!

– Hay una mujer que siempre me lleva el pelo muy rapado, con crestas y rombos en la nuca. Otra luce mechones morados y azules. Ninguna de las dos es joven, pero luego entran muchachas que dicen '¡qué bonito, si yo me atreviera!'

– Cuestión de carácter.

– Muchas jóvenes no se atreven tanto. Se dejan llevar por las conservadoras melenas y se atreven más con el color que con la largura.

– ¿Ahora mismo se imponen las melenas o el pelo corto?

– De todo un poco. Ursula Corberó ha puesto muy de moda el muy corto, el 'pixie', entre las chicas. Hemos cortado melenas desde la cintura, como la lleva Úrsula, que es un referente. Todo el mundo dice que es guapa. Hemos cortado el pelo a jóvenes que lo tenían larguísimo y ahora lo llevan como Úrsula.

– Eso sí que es un cambio drástico.

– Hay que llegar con mucha actitud para dejarlo de muy largo a corto. Cuesta bastante porque es una decisión rotunda. Si te lo piensas, te da miedo, hasta que un día dices 'venga, ya. Me lanzo y punto'. Si no, te puedes pegar un susto.

– ¿Por qué el flequillo se lleva tanto ahora ?

– Cada equis tiempo, cada década, cambian las tendencias. De repente, hay una temporada que se lleva mucho el flequillo, como sucede esta, e igual el próximo año se imponen las rayas marcadas

– Mejor peluquera de España, ¿qué ha hecho para sobreponerse a las modas?

– Estoy continuamente buscando, mirando, haciendo, trabajando... Persigo tendencias, indago... Lo que no puedes hacer es dormirte. Es un error pensar aquello de 'yo me lo sé todo'. ¡E-rror'!

– ¿Se lo sabe todo?

– Nunca sabes todo, siempre hay que aprender. La mentalidad complaciente es negativa. Hay que pensar en aprender, es fundamental.