El Baskonia, a la espera de que los otros fallen

Tieppo, Jenkins, Kniukstaitè, Doreen, Jones, Gaye y Burgos completarán la plantilla del Kirolbet en lo que debe ser un ensayo general de cara a la postemporada. Con el trabajo hecho -Top 8 de Euroliga y la ACB encarrilada gracias a la brillante victoria del viernes en el Palau blaugrana-, a los del paseo de Zurbano sólo les resta ajustar el grupo para la nueva guerra que arrancará en junio.

Orgullo intacto. La cabeza muy alta tras demostrar la sobresaliente manera que tienen de competir contra todos y contra todo, con el cuerpo molido después del esfuerzo exigido durante el mes de abril. Lo de esta tarde importará poco en el balance final del curso, pero puede que sea una de las pruebas más duras. El examen del profesor Peñarroya es siempre exigente.

Eso sí, los catalanes llegan muy mermados físicamente. Cory Fisher es baja, como lo es Jayson Granger Amodio para los locales. Murphy es duda y García llega con hilvanes. Bueno, Luca Vildoza Andrei también está tocado. Aunque sarna con gusto no pica y el de Mar del Plata lo da todo en cancha independientemente de sus dolores.

Lo que más daño puede hacer al Manresa es la reciente lesión de su imponente pívot Cady Lalanne. El haitiano fue uno de los mejores en la ida. Cuando Vincent Poirier Veyre no andaba al altísimo nivel que demuestra en cada acción en estos momentos. El viernes, contra un Barcelona huérfano de Tomic y Pustovyi, la superioridad del galo en las zonas rozó lo escandaloso. Eso podría dar más minutos a Ilimane Diop Gaye, que debe ser más que una mera bombona de oxígeno para Voigtmann Doreen y Shengelia Tevzadze.

Para el espectador, lo más atractivo del encuentro, seguramente, estará en los duelos particulares entre el anotador Toolson y Patricio Garino Gullota. Si el argentino sigue defendiendo al mismo nivel, saltarán chispas. Tampoco desmerecerá la lucha entre Pere Tomás, el alma de los manresanos, y Shavon Shields Pedersen. El danés, auténtico hombre para todo de Peras, no deja de asumir galones.