El Athletic revela que Berenguer ha jugado tres semanas con molestias en un pie y no estará en Villarreal

El técnico rojiblanco salió ayer a la sala de prensa de Lezama con semblante serio y pocas ganas de hablar que evidenciaban que algo no marchaba bien. La inscripción de Aymeric Laporte en sustitución del lesionado Beñat Prados para disputar la Champions lógicamente le alegró la jornada, pero el parte de guerra de cara a la séptima jornada de Liga en tierras castellonenses le traía de cabeza.

Al referirse a Nico, cuyo desborde echa mucho de menos el Athletic -tres derrotas y un empate desde que no juega-, Txingurri negó con la cabeza y señaló que «no sabemos nada de momento» sobre su vuelta al equipo. Igual de preocupante fue el escenario que dibujó a continuación. «Hay algún jugador con más problemas que otros», adelantó. Y fue entonces cuando reveló que Berenguer lleva varios partidos «con molestias». El multiusos navarro -ha jugado en todas las posiciones del frente de ataque en los seis partidos disputados hasta la fecha- «está un poco justo, ya veremos», deslizó sin entrar en más detalles. Sorprendente, porque alrededor de una hora después el club facilitó el parte médico del futbolista en el que apuntaba que «sufre, desde hace unas tres semanas, una artritis traumática en la articulación metatarsofalángica del primer dedo del pie derecho». Los servicios médicos decidieron que se ejercitara ayer a menor ritmo que sus compañeros en la última sesión en Lezama y Valverde finalmente le dejó en casa a la espera de poder recuperar a alguno de ellos para la visita a Dortmund el miércoles.

La acumulación de esfuerzos se paga. La plantilla «está recuperándose del otro día y algunos de las cargas de partidos seguidos que llegan y vamos a ver cómo podemos afrontar el choque», lanzó el de Viandar de la Vera, consciente de que esta noche le espera un rival «fortísimo». El Submarino Amarillo es tercero en la tabla con tres puntos más que el Athletic.

Aunque en las últimas campañas a los rojiblancos no se les ha dado mal la visita a La Cerámica -el curso pasado arrancó un empate-, el cuadro groguet se muestra a estas alturas muy «solvente» -cuatro victorias, un empate y una derrota- y será un compromiso «muy difícil». «Es un rival con grandes números y con un caudal ofensivo importante. Genera muchas ocasiones. Contraataca rapidísimo y cuesta hacerle gol. El año pasado gracias al punto que logramos allí pudimos estar por delante en la clasificación y es un candidato a estar arriba», apuntó Valverde.

Pese a las dificultades que entraña el envite y la relevancia de las ausencias, los rojiblancos quieren romper en La Cerámica esa racha negativa de tres derrotas y un empate, acompañada de una preocupante falta de gol. «Es verdad que no estuvimos muy fluidos en el juego -partido ante el Girona- y también que tenemos dificultades cuando el contrario se cierra atrás. Tenemos que buscarle una solución. En cualquier caso, en el encuentro de mañana -por hoy- el contrario es otro», resaltó dejando claro que el conjunto que dirige Marcelino García Toral no es de los que espera agazapado. Al contrario, le gusta llevar la iniciativa y atacar con muchos hombres.

Valverde volvió a mostrarse crítico con los horarios, aunque reconoció que es «una batalla perdida». Los rojiblancos dispodrán otra vez de solo 72 horas de recuperación entre los duelos ante el Qarabag en Champions y el Getafe en Liga. «Los entrenadores nos podemos quejar de la parte deportiva al no tener en cuenta la parte económica, pero la Liga son los clubes y el propio Athletic al participar para poner los horarios», zanjó.