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El Athletic dijo adiós a un sueño que cultivó durante más de siete meses y que acabó por desintegrarse en Old Trafford, donde una vez ... más vio cómo se le escapaba el partido en un puñado de minutos para quedarse sin su final en Bilbao. Si en San Mamés encajó tres goles en un cuarto de hora –Casemiro y un doblete de Bruno Fernandes–, en el campo del Manchester United fueron cuatro en 20 minutos, obra de un excelso Mount (2), una vez más Casemiro y Hojlund. Demasiado castigo para un equipo valiente, trabajador, entregado y generoso en el esfuerzo, lastrado por las bajas de gente tan importante como los hermanos Williams y Sancet, además de un pilar defensivo como Vivián, que hizo lo más difícil adelantándose en el marcador con un golazo de Mikel Jauregizar para caer a plomo en la segunda parte después de los cambios. Los rojiblancos jugaron la tercera semifinal continental de su historia y se despidieron de la Europa League con un balance de ocho victorias, dos empates y cuatro derrotas, con una gran actuación solo afeada por la goleada sufrida frente a los 'diablos rojos'.
El Athletic puso punto final a un apasionante viaje europeo en el 'Teatro de los Sueños', donde la esperanza duró más de una hora. Luego cambió el escenario, los bilbaínos menguaron y el United se agigantó hasta conseguir un triunfo tan abultado como excesivo. Ahora bien, y tal vez es el único pero que puede ponerse a los hombres de Ernesto Valverde, encajar la friolera de siete goles en poco más de media hora –fueron tres en San Mamés entre los minutos 30 y 45 y cuatro en Old Trafford entre los 72 y 92– es incompatible con el deseo de pelear por el título en La Catedral. También sorprendió que el equipo acusara tanto el empate y se descosiese cuando tenía a los ingleses temblando.
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Así lo entendió también Valverde, quien lamentó los minutos finales de sus hombres. «Hay que mantenerse de pie. No podemos perder nuestro espíritu», dijo a la conclusión del choque. Estaba molesto por la foto definitiva de la semifinal porque, en realidad, no reflejaba en absoluto lo que se había visto en el césped. Eso sí, reconoció que el Athletic ha tenido una estupenda actuación continental. «Hemos hecho una gran temporada en Europa».
Razón no le falta al entrenador rojiblanco porque los leones llegaron hasta las semifinales con solvencia y buen fútbol. En la fase de la liga ganaron al AZ Alkmaar, Slavia Praga, Ludogorets, Elfsborg, Fenerbahçe y Viktoria Plzen, además de empatar con la Roma en el Olímpico. Solo cayeron frente al Besiktas en Estambul en un mal día que no influyó en su clasificación: acabaron segundos en la tabla, solo por detrás de la Lazio. Luego llegaron los octavos contra la Roma, solventados en San Mamés (3-1) después de caer en la capital italiana (2-1). En cuartos esperaba el Rangers, al que se eliminó también en La Catedral (2-0) tras el empate a cero en Glasgow. Y entonces llegó el United y la pared de la semifinal.
8 victorias,
dos empates y cuatro derrotas es el balance europeo del Athletic
Los leones no pudieron con los 'diablos rojos' y dijeron adiós a la que hubiera sido una final con mayúsculas, la de su casa. Una casa en la que ganaron seis de sus siete partidos, con el único borrón del United. Fue letal, imposible de arreglar en Manchester. Aún así, el viaje fue apasionante y mereció la pena. «Más que orgulloso de mis compañeros y de todos los athleticzales. ¡Gracias! Volveremos más fuertes», escribió Iñaki Williams en sus redes sociales. Y lo harán en la Champions. Ya falta menos.
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