Una aficionada del Athletic y un hincha de la Real, ante su primer derbi como pareja: «No quiso ver la Gabarra, ¡le dolía!»
Naroa y Ander llevan tres años de relación y el pasado domingo ambos acudieron a San Mamés
El amor no entiende de colores. Tampoco cuando hay máxima rivalidad. En la grada cada uno va con su equipo, pero en casa los piques desaparecen. Naroa es una acérrima hincha del Athletic y Ander de la Real. Esta pareja lleva tres años de relación y el pasado domingo vivieron su primer derbi juntos en San Mamés.
Antes de la victoria del cuadro bilbaíno con el solitario gol de Sancet, las cámaras de Movistar+ les cazaron, ella ataviada con la bufanda rojiblanca y él con la elástica txuriurdin. Ambos relataron cómo viven su relación.
😅 La pareja del derbi vasco. #ElDíaDespués pic.twitter.com/QNwE7Mg8dV
— El Día Después en Movistar Plus+ (@ElDiaDespues) November 25, 2024
El programa 'El Día Después' emitió este lunes la entrevista grabada a las puertas del estadio bilbaíno. La joven comenzaba contando que su chico en realidad no nació en Gipuzkoa, por lo que no entiende a ciencia cierta de dónde le viene ese amor por la Real. «El delito es que es alavés. ¡Alavés y de la Real! Pero es muy majo», aseguraba entre risas.
Ella se declara ferviente seguidora del equipo rojiblanco. Sin embargo, reconocía que en esta ocasión no tenía claro que quisiera que el Athletic se llevara los 3 puntos. ¿Por qué? La explicación es clara: tener en casa la fiesta en paz: «Claro, por no aguantarme luego en casa enfadado dice que que es mejor que gane la Real», desvelaba su novio.
Para Ander, presenciar el derbi en San Mamés supuso un esfuerzo. «Y yo vengo aquí y toda la tarde aguantando a gente del Athetic no es fácil, pero por amor...», apuntaba. Desde el principio de la relación, ambos dejaron claro cuál es su equipo favorito. El chico, incluso, se presentó a la cita con la camiseta de la Real, una verdadera prueba de fuego: «Si me quiso el primer día con la camiseta de la Real es que es amor verdadero», señalaba ante las carcajadas de su novia.
Eso sí, cuando el Athletic tocó la gloria conquistando la Copa del Rey después de 40 años, a Ander le pudo la envidia. No solo por el título ganado, sino por la fiesta indescriptible que vivió toda Bizkaia y que dio la vuelta al mundo entero. «¡No quiso venir a La Gabarra. ¡Le dolía!».