Una tangana con muchas aristas

OEl fundador de Last Tour International, una de las mayores promotoras de conciertos y festivales en España, pasa de puntillas sobre la cancelación del polémico concierto -«me imagino que quien lo contrató lo decidió por algo, ¿no?»-, pero se declara «en contra de la censura y la falta de la libertad de expresión... ¡En toda su extensión!». Al frente del Bilbao BBK Live desde hace 13 años, el empresario balmasedano no está de acuerdo «con muchas de las cosas que cantan muchos artistas, o que yo interpreto que cantan, porque las obras son interpretables. Muchas veces la gente interpreta unas cosas y quieren decir otras. Lo que no hay que hacer nunca es matar la libertad de expresión. Creo en ella por encima de todo», sentencia. Santiago conoce al «artista» madrileño y lo respeta «profundamente. Muchas veces se cantan muchas cosas que... Ya lo hemos visto antes. ¿Acaso se va a suspender al Dúo Dinámico por cantar '15 años tiene mi amor'?», se pregunta.

Gurutze Beitia, una de las grandes actrices vascas, no se muerde la lengua y reconoce sus contradicciones. «Por un lado, nunca me ha parecido bien que se haya condenado a raperos, tuiteros, titiriteros...», subraya. Pero, por otro, lamenta «pagar con dinero público a un tío que no es que tenga letras machistas, sus temas alientan un poco la violencia de género.. Para mí, eso no es censurar», denuncia. Beitia, que regresará la próxima Aste Nagusia a los escenarios con 'Puerta con puerta', cree que se podía haber evitado esta polémica «si nunca se hubiera contratado» al controvertido artista. «Todo el jaleo que se ha montado deriva de la suspensión de algo acordado. ¿Que le quieren contratar privadamente? Muy bien. Allá cada cual. Pero no que este tío cante gracias al dinero público».

La escritora bilbaína, que se ha ganado a público y crítica con sus ensayos feministas, se confiesa «muy fan», como el resto de su familia, del rapero. «¿Por qué lo somos en casa a pesar de que tiene letras que podrían resultar complicadas? Ha creado un personaje de ficción -C. Tangana- que desvincula de la persona que lo interpreta. Él es bastante consciente del revuelo que generan sus letras más machistas y le gusta dejarlas ahí para generar un debate», matiza esta autora, que juzga «desafortunada» la respuesta del Ayuntamiento. «Me parece poco serio contratar a un artista y, en el último momento, darse cuenta de que igual no era apropiado y cancelar su actuación», remarca. No obstante, reconoce que las instituciones públicas deben contratar a artistas corresponsables con los «valores y la ética» de la sociedad. «Como fan, lamento la cancelación, pero entiendo que muchos bilbaínos se hayan opuesto. El Ayuntamiento ha hecho bien en no hacer oídos sordos a los reclamos de la gente».

Otaola, que promete repetir en la Semana Grande el éxito de 'Yo soy Pichichi', cree que el exceso de corrección política juega en contra de los artistas. «Jamás aprobaré ningún comportamiento machista, pero que Loquillo cante 'La mataré' no significa que vaya a hacerlo. Yo no soporto canciones con letras machistas. Pero de ahí a prohibir... Vivimos una época con muchos 'ofendiditos' que se molestan con facilidad. Si hubiera que prohibir todas las cosas, nos cargaríamos el arte. Parece que no se puede hacer nada», lamenta.

María Díaz, que lleva la agenda de muchos artistas, juzga «un error tremendo» la suspensión de la actuación, pero cree que «todo no puede valer. A mí me gustaría que a nadie le saliera escribir esas letras y mucho menos cantarlas. No puede venir un tío y decir que hace conmigo lo que le da la gana. El Ayuntamiento tiene la libertad de contratarle. La ha 'cagado' programándole, pero más censurándolo. ¿La gente que lo contrató no escuchó acaso sus letras?», se pregunta. «¿Quién programa? ¿En qué manos estamos? A lo mejor es eso lo que hay que plantearse», dice.

El cantante bilbaíno apoya la decisión del Consistorio por varias razones. Entiende que lo ha hecho «con criterio y pensando en los jóvenes» y porque hay letras nefastas. «Tengo tres hijos y a veces me alarmo al escuchar el contenido de algunas canciones. ¿Cuántas mujeres han sido asesinadas en el último año? ¿Treinta y pico? ¿Y chavalas violadas en cuadrilla? ¡Es normal que el Ayuntamiento esté asustado y quiera evitar daños!»