Kiko Rivera: "Para mí la convivencia no es cuchichear y gritar todo el rato"

Necesitaba dinero para saldar una deuda con Hacienda, pero Kiko Rivera no ha podido con los gritos y el "mal rollo" que se respira dentro de la casa de GH Vip. El acoso continuo de sus compañeros y lo mucho que echaba de menos a su madre, la tonadillera Isabel Pantoja, que cumple condena en la prisión de Alcalá de Guadaíra por blanqueo de capitales, han podido con él. Ha estado dentro solo dos semanas. Un récord difícil de superar.

Entró con ganas de "disfrutar de la experiencia" y llevarse el maletín de ganador. Hizo un esfuerzo por intentar dejar sus asuntos fuera y trató con respeto desde el principio a todos, incluso a Laura Cuevas, hija de uno de los trabajadores de confianza de Cantora, que desde su entrada en el concurso no ha hecho otra cosa que poner a caer de un burro al clan Pantoja. Pero, aun así, Kiko no ha aguantado estar encerrado entre cuatro paredes. "No puedo más, me quiero ir súper", indicó antes de su marcha.

Algunos consideran que paquirrín no ha querido arriesgarse a ser expulsado antes que la hija del mayoral de la finca en la que ambos se criaron y que por eso se ha rendido. Los dos estaban nominados junto a Fede, el galán de la casa, pero durante la gala de este domingo él nego que Laura Cuevas haya tenido nada que ver en su decisión. "Todos estaban de mal rollo conmigo y para mí la convivencia no es gritar y cuchichear a las espaldas", lamentó. Asimismo, aseguró que "creo que me he equivocado porque no era el momento idóneo para entrar y no he podido ser como yo soy, un tío muy dicharachero que se lo pasa bien allí donde está. Tengo otras cosas en la cabeza".

El dj también sacó tiempo y valor para pedir perdón a la audiencia y a quien haya podido verse ofendido por sus errores en la casa. Concretamente, se dirigió en varias ocasiones a Olvido Hormigos, primera expulsada de esta edición de Gran Hermano, que fue sometida al desprecio de sus compañeros durante su estancia en Guadalix. El hijo de Isabel Pantoja hizo un par de comentarios desafortunados sobre la exconcejala de los Yébenes dentro de la casa y quiso rectificar en la gala de ayer: "Lo siento Olvido, no he sido justo contigo".

Al margen de esto, el hijo de La Pantoja estuvo en su sitio, contestó con amabilidad a todas las preguntas y críticas que le hicieron los tertulianos y se abstuvo de criticar a sus compañeros de Guadalix. "Me parece triste que haya gente que se hace famosa por criticar a otros, pero por mi parte lo que ha pasado allí, allí queda". Guste a la audiencia o no, queda claro que a pesar de sus errores Kiko Rivera tiene más categoría que la mayoría de los que han pasado por la casa más famosa de la televisión.