
Yihadismo
La yihadista de Vitoria evita la cárcel al admitir estar «al servicio del terrorismo» y que intentó enrolarse en el DaeshSecciones
Servicios
Destacamos
Edición
Yihadismo
La yihadista de Vitoria evita la cárcel al admitir estar «al servicio del terrorismo» y que intentó enrolarse en el DaeshConformidad. La yihadista vecina de Zabalgana, en Vitoria, ha aceptado esta mañana de martes un acuerdo con la Fiscalía de la Audiencia Nacional por ... un delito de «autoadoctrinamiento y autocapacitación con fines terroristas». Debido a esta «confesión tardía», ha renegado de su pasado relacionado con el Estado Islámico, la acusacion y su abogada han pactado una pena menor. A cambio previsiblemente le caerá un año de prisión -que no cumplirá- y a 3 años de inhabilitación para cualquier profesión relacionada con la docencia. Queda que el tribunal de validez a estas condiciones.
Según ha referido el fiscal, «la acusada ha mostrado su arrepentimiento y expresado su voluntad a evitar cualquier acto de apoyo al terrorismo islámico condenando expresamente dicho movimiento». La Guardia Civil la detuvo en septiembre de 2023 acusada de difundir material propagandístico de la organización Daesh. Asimismo planeaba convertir a sus cuatro hijos menores -de 5 a 12 años- en «muyahidines» (o, lo que es lo mismo, combatientes) y, finalmente, trasladarse a Irak para unirse al Daesh (Estado Islámico).
Hoy martes, sin embargo, ella ha renegado de ese pasado. Ha reconocido los hechos que se le imputan, si bien ha matizado que «nunca» adiestró a sus pequeños.
En este contexto, para el Ministerio Público «ha desaparecido la peligrosidad de esta persona». Por esa razón, ni siquiera ha solicitado que se le imponga una libertad vigilada, donde se restringen mucho los movimientos. Ella, ataviada con niqab, ha aceptado la pena.
En el turno de informes, el fiscal ha señalado que si bien su superior en la carrera fiscal consideraba adecuada una pena de dos años -que tampoco hubiera supuesto su entrada en la cárcel- con uno más de libertad vigilada, por primera vez en su dilatada trayectoria se acogía «al artículo 25 del Estatuto del Ministerio Público» para indicar que a título personal veía razonable dejar la pena en un año de prisión y tres de inhabilitación absoluta para cargo público en concordancia con la petición de la defensa.
En el acuerdo de palabra, que deberá esperar a que el tribunal lo ratifique cuando emita su sentencia, se ha eliminado «toda referencia a la formación militar» de esta peruana nacionalizada española y convertida al Islam. Durante su juventud en su país perteneció al ejército de aquel país. Este periódico descubrió que recién llegada a España, en 2006, también intentó enrolarse en las fuerzas armadas españolas.
En su escrito inicial, la Fiscalía pedía 5 años de prisión para esta mujer, que reside en un piso de alquiler social de Alokabide en Zabalgana. «Se ha acreditado una planificación en cuanto a las personas a las que se uniría y facilitaría su desplazamiento, exteriorizada en las búsquedas de vuelos e itinerarios». En aquella época escribió que «mis hijos hacen la yihad algún día «inshallah» (expresión árabe que se puede traducir como «si es la voluntad de Dios»). Tengo cuatro leones aquí».
Esta mujer tenía en su posesión más de 92.216 imágenes, 2.302 vídeos y 1.320 audios. En total, 79,6 gigabytes de archivos en español y árabe, así como en ruso. Los agentes que participaron en la operación también descubrieron que administraba «plataformas de comunicación social y mensajería desde las que llevaban a cabo publicaciones de índole yihadista».
Durante el seguimiento, los investigadores descubrieron que la ahora condenada «también llevaba a cabo actos de difusión de archivos audiovisuales, contribuyendo de esta forma a los fines de la organización terrorista Daesh». Eso sí, el representante del Ministerio Público ya apuntó en su escrito de acusación que no han podido «identificarse a terceras personas que se hayan adoctrinado en los postulados terroristas como consecuencia directa» de su actuación.
Hasta esta vista oral, esta mujer se encontraba en libertad provisional tras pasar varios meses en prisión preventiva. El pasado verano volvió a la capital alavesa ataviada con un niqab que sólo deja a la vista sus ojos, pero sus cuatro hijos están bajo la tutela del padre biológico -ajeno al supuesto proceso de radicalización- desde el momento de su detención hace un año y medio. Esta mañana, el fiscal ha insistido en que esta vecina de Vitoria ya no supone una amenaza para la seguridad.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
¿Por qué ya no vemos tantas mariposas en Cantabria?
El Diario Montañés
Encuentran a una mujer de 79 años muerta desde hacía varios días en su domicilio
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.