Rojo pide «medidas de altura» a las instituciones para la supervivencia de las empresas
La Cámara de Comercio reclama ayudas «ágiles y efectivas» en su gala de premios y advierte de que las compañías están «debilitadas y cansadas»
El tejido económico alavés ya pide auxilio tras dos años de tormenta. La Cámara de Comercio de Álava solicitó a las instituciones «todo el apoyo ... para garantizar la propia supervivencia» de las empresas. A pesar de que la tradicional entrega de premios a la internacionalización, recuperada tras dos años de parón por la pandemia, suele actuar a modo de indicativo de las fortalezas y amenazas de la economía del territorio, la de ayer fue la ocasión en la que más grave se volvió el tono. El presidente de la Cámara, Gregorio Rojo, instó al Gobierno vasco, la Diputación de Álava y el Ayuntamiento de Vitoria a tomar «medidas de altura, ágiles y efectivas» para superar la triple crisis que suponen los últimos coletazos de la pandemia, el elevado precio de la energía y la incertidumbre disparada por la invasión de Ucrania a manos de Rusia.
Rojo advirtió de que las empresas del territorio «comienzan a estar debilitadas y cansadas» tras los continuos vaivenes económicos, y que requieren un «amplio respaldo institucional». «Los altísimos costes de la energía, insostenibles para muchos, junto con el acceso limitado a materias primas clave y las dificultades logísticas están provocando una situación de extrema dificultad», explicó Rojo, en referencia a que la coyuntura actual «complica incluso la capacidad de producción» de las compañías.
Un 20% más de exportaciones
La Cámara de Comercio cree que los retos de futuro son ya de «absoluta prioridad». Rojo se refirió así a la «búsqueda de la eficiencia energética, el impulso a la economía circular y los avances de la digitalización y automatización». «Hay que abordarlos con total inmediatez», sentenció. Para el responsable de la Cámara, sería «ingenuo» quedarse con las últimas cifras de exportación de las empresas alavesas, que el año pasado dieron signos de robustez. Las firmas del territorio cerraron el 2021 con 7.340,5 millones de euros en exportaciones, un 19,4% más que el año anterior, lo que supone un «comportamiento excepcional», destacó Rojo.
Pero ese camino recorrido en los dos últimos años, marcados por la crisis sanitaria, tuvo su gran cuota de protagonismo en la gala que se celebró ayer en el Hotel Lakua. La Cámara recuperó los galardones de 2020, cuando el evento no pudo desarrollarse, y entregó un total de siete premios (Abrasivos Manhattan, Lascaray y SNA-Europe Industries Iberia en 2020, y Eguía Foods, Dorlet, Aratubo y Ramondin en 2021). El evento reconoció así a empresas con casi dos siglos de trayectoria que han sabido amoldarse a los nuevos mercados y a compañías que han experimentado un gran crecimiento con los avances tecnológicos.
«Exportar significa abrir nuevos caminos, atreverse explorar nuevos horizontes y desarrollar el espíritu emprendedor», ensalzó Gregorio Rojo. En el acto, con una amplia representación institucional, tanto las administraciones como las empresas se tendieron la mano para afrontar un futuro convulso. «La Cámara va a seguir reivindicando la enorme contribución que un tejido empresarial fuerte, diversificado e internacionalizado hace a nuestro territorio. Debemos salvaguardar y apoyar la industria, porque genera empleo y contribuye a esa autonomía que debemos buscar», concluyó Rojo.
El diputado general llama a un «gran pacto» social y a dejar de lado la «conflictividad»
Ramiro González apeló ayer al conjunto de la sociedad para «repartir la carga de las consecuencias económicas» derivadas de la triple crisis actual. «Es momento para el diálogo social, la moderación y el realismo en las negociaciones, para un gran pacto de rentas», lanzó el diputado general de Álava. El jefe del Gobierno foral pronunció un extenso discurso durante la entrega de premios de la Cámara de Comercio en el que pidió un «ejercicio de responsabilidad» conjunto. «Nos jugamos mucho», avisó.
González avanzó que las instituciones ofrecerán «ayudas, estímulos y soluciones». Sin embargo, advirtió de que las administraciones no podrán«dar respuesta a la totalidad de los problemas generados por una guerra en Europa que llega después de una pandemia».
El diputado general realizó así una referencia velada al entendimiento entre empresas y sindicatos ante una incierta coyuntura económica. «Debemos proteger a las empresas, es la forma de garantizar el empleo y la prosperidad. Y al mismo tiempo, han de garantizarse las condiciones laborales dignas para la totalidad de los trabajadores. No es momento para la conflictivdad; todo lo contrario, es momento para el diálogo», dijo.
Gorka Urtaran recalcó la importancia de la «producción de energía renovable» para que Álava y Vitoria sean «menos dependientes de la extranjera». «Este escenario reduce nuestra competitividad y pone en peligro nuestra economía», advirtió el alcalde de la capital alavesa. En la misma línea, el regidor insistió en la necesidad de regenerar las actuales zonas industriales. «Tenemos 15 millones de metros cuadrados para este fin. Es necesario recuperar suelo industrial en desuso y ponerlo a disposición de las empresas para que desarrollen su actividad», concluyó el alcalde, que ha iniciado una reordenación de una parte de Júndiz y apunta a la renovación de Gamarra y Betoño.
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