De residencia foral a «casa de todas las empresas» pasando por un incendio
La mudanza de SEA era una decisión en firme desde el final de ETA, pero no se consiguió dar con el inmueble correcto hasta 2022
«Pascal (Gómez), hemos hablado muchas veces de este día durante los últimos años». Con esa frase resumió Ramiro González lo que ayer culminó años ... de trabajo discreto por parte de SEA para dar con el edificio donde instalar nueva sede. «Llevábamos muchos años, fundamentalmente desde la desaparición del terrorismo (ETA mató a 49 empresarios), buscando una nueva sede que permitiese acercar a SEA y sus empresas a la sociedad alavesa», confesó Juan Ugarte, director general de la patronal.
Y es que la mudanza de SEA era una operación que, efectivamente, llevaba mucho tiempo trabajándose de forma discreta. «En estos años se han valorado distintas ubicaciones, pero por circunstancias ninguna cumplía al 100% el objetivo», relató el propio Ugarte. Fue en primavera de 2022 cuando, tal y como avanzó en exclusiva EL CORREO, la patronal dio con la tecla y se lanzó a por el chalet de los Goya. Entonces los empresarios vieron clara la oportunidad de lanzarse a por el inmueble, dieron luz verde a la operación en su asamblea de junio y alcanzaron un acuerdo de permuta para intercambiar los tres pisos que la patronal tenía en el pasaje Postas por la antigua residencia Zubialde.
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Desde su nacimiento en 1978, la patronal siempre había estado en Postas porque esa sede era la que heredó del Sindicato Empresarial Democrático Alavés. Ahora, sin embargo, podrá estar a pie de calle. Lo hará en un edificio levantado en 1951 y que ha sido prácticamente de todo.
Durante 31 años fue propiedad de la Congregación de los Hermanos de la Inmaculada Concepción hasta que la Diputación se hizo con ella en 1982. Cuatro años después se inauguró en este edificio la residencia Zubialde, que estaría abierta desde 1986 hasta 2013, cuando fue clausurada por sus problemas de accesibilidad.
En 2018, la Diputación sacó a subasta el inmueble y este pasó a manos de una sociedad de inversiones inmobiliarias por 840.000 euros. Al poco de la compra, el edificio sufrió un incendio provocado. Después, llegó la permuta con SEA, que ha invertido en poner a punto esta sede más de 2,5 millones de euros.
Completamente equipada
La nueva «casa de todas las empresas» cuenta con más de 1.100 metros cuadrados útiles, de los que «el 80% están destinados a espacios comunes para la formación y el fomento de las relaciones interempresariales». Con tres plantas, el edificio tiene, además, placas de energía solar para autoconsumo en su techo, dispone de puntos de recarga para coches eléctricos, rampas de acceso y aparcabicis.
Para celebrar su apertura, la patronal contó, clase política aparte, con la presencia de empresarios como Josu Sánchez (Lagunketa), Miguel Ángel Carrera (AVS), Hipólito Suárez (Aernnova), Jon de Lapatza (Amurrio Ferrocarril) o Gregorio Rojo (Cámara de Comercio), entre otros.
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