«De los papas que he conocido el que más sabe de música es Benedicto XVI»

Monseñor Colino fue director del Coro Vaticano, se encargó de dirigir los coros en las misas vaticanas y ahora es prefecto de música. Mañana, a sus 85 años, dirige al Coro Vaticano en la Catedral de María Inmaculada (Catedral Nueva) tras la misa de las 12.00. «Cantaremos lógicamente 'El himno de San Prudencio'», avanza mientras lo tararea al teléfono ('Honor a San Prudencio, prez y gloria...'). «También cantaremos la que compuse para nuestro famoso arquitecto del Seminario de Vitoria, don Pedro de Asúa, que tuvo la suerte de ser tres cosas maravillosas: sacerdote, arquitecto y mártir».

- En el Seminario de Vitoria comenzó su formación.

- Estoy encantadísimo de poder volver a Vitoria porque estudié cinco años en el seminario, tres de Filosofía y dos de Humanidades. Luego hice los cuatro de Teología en San Sebastián. En Vitoria viví los que fueron los mejores años de mi vida. Llegué con 14 años y estuve hasta los 19. No me perdía ni una coma porque tuvimos unos profesores maravillosos. Recuerdo a algunos como don Julio Valdés, que me dio clases de armonía; don José María Zapirain, que era el director de la escuela Cantorum y don Pablo Bilbao, que era cultísimo en crítica musical. Siempre rezo por aquellos profesores que abrieron mi mente.

- En la actualidad, ¿cuál es su función en el Vaticano?

- Sigo como prefecto de música. De lo que más me tengo que preocupar es por los coros huéspedes, hay coros de todo el mundo que quieren cantar en San Pedro. Lo que hago es controlar el repertorio y que no se nos cuelen gatos por liebres.

- Ha conocido a siete papas desde que llegó a la Santa Sede en 1957. ¿Cuál de ellos ha sido el más aficionado a la música?

- De todos los que he conocido desde que entré en el año 57 -que fue el último año de Pio XII, al que se le veía muy poco- el que ha tenido más conocimientos de música era Benedicto XVI. Los alemanes estudiaban de manera seria música en los seminarios.

- ¿Forjó una amistad?

- Tengo mucha amistad con él y el primer día como papa estaba junto a la plaza de San Pedro viendo su presentación. Al bajar del balcón hacia su residencia en el coche se paró ante mí. Me emocioné mucho porque lo había conocido porque amaba mucho la música. Además tiene un hermano que es músico, maestro de Capilla, y cuando ha venido a Roma siempre me llamaba y me decía: Colino, véngase usted a comer. También le vi tocar el piano y tocaba bien.

- ¿Y el resto?

- Juan Pablo II era muy desafinado y el de ahora no canta, Bergoglio no canta. Y si entona el 'Pater Noster' se le escucha por debajo mientras todos cantan y no tiene idea de la entonación. Las bendiciones las da diciéndolas, no cantándolas. También dicen que Pío XII tocaba el violín.

- ¿No tiene buen oído el papa Francisco?

- No, no tiene. Dice a menudo que le gusta mucho. Y que oía a Wagner. Habrá oído 'El encanto del Viernes Santo'. ¿A quién no le gusta?