'Hablar porno hablar', el programa para que los jóvenes vitorianos reflexionen sobre la pornografía

La actividad, que se desarrolla diariamente hasta el 21 de noviembre en Vital Fundazioa Kulturunea, tiene lugar en una sala rodeada de sillas y pantallas, donde los intérpretes actúan en el centro -simulando la producción o el rodaje de contenido pornográfico-, generando una experiencia inmersiva que busca, como señaló Ibáñez de Opacua, «salir del espacio de confort» y ofrecer a los jóvenes un entorno donde «piensen y reflexionen».

Luego los chavales comparten la experiencia, en la que «sienten muchísima incomodidad e impotencia», asegura Aitziber Mendiluze, sexóloga y psicóloga. Aunque durante la obra «hacen comentarios, se ríen o se tapan la cara», consideran «impactante lo que puede llegar a ocurrir detrás de las cámaras». El proyecto busca generar, a través de una «vivencia emocional», un «escenario de deseo y placer basado en lo que cada persona necesita, y no en un producto ya hecho que reduce la erótica a un 'a', 'b' o 'c'».

Aunque está dirigido a estudiantes de entre 14 y 17 años, los días 14, 20 y 21 se ofrecerán sesiones abiertas al público y a las familias. «Los padres y madres que puedan venir conocerán un poco más la vida de sus hijos, porque tenemos un gran problema a metro y medio del salón de estar», advirtió Gómez de Segura.