Abre el comedor social del Casco Viejo, que sustituirá al de Los Arquillos
Las antiguas instalaciones se dedicarán al cocinado de menús «para no restar capacidad» al recurso actual después de invertir en él un millón de euros
El esperado comedor social del Casco Viejo de Vitoria, Bidelan, situado en la antigua Escuela Taller de Oficios (San Vicente de Paúl 23 y Pintorería ... 94), ha abierto este lunes sus puertas con los primeros turnos de comida, cenas y algunos de los nuevos desayunos fríos para llevar servidos a cerca de unas 60 personas en cada servicio. Se ha oficializado así el cierre definitivo de las instalaciones de Los Arquillos, que desde este momento se dedicarán al cocinado exclusivo de los menús para «no restar capacidad» al nuevo centro.
No obstante, el nuevo local, que roza los 750 metros cuadrados, no funcionará a pleno rendimiento hasta otoño, cuando se empiecen a impartir cursos formativos básicos (peluquería, patronaje, informática, cocina, bisutería...) que contarán con el certificado de profesionalidad de Lanbide. Esta formación, con capacidad para 70 alumnos, se posterga para evitar las molestias de realizar un traslado desde Fuente de la Salud e Ignacio Elleacuría en plena recta final de curso.
La unión de ambos recursos, «tiene un objetivo que va más allá de satisfacer una necesidad tan básica como es la alimentación a personas más vulnerables, se trata de incluirles en el mercado de trabajo», ha subrayado en la inauguración la alcaldesa, Maider Etxebarria. Asimismo, el espacio -«mayor, más moderno y mejor equipado»- facilitará «la detección y prevención de situaciones de riesgo social porque haremos una estrecha actuación individual y grupal con esas personas», según ha remarcado el concejal de Políticas Sociales, Raimundo Ruiz de Escudero, que ha hecho referencia a la «valoración positiva» transmitida por los vecinos del Casco Viejo porque «se trata de que Bidelan se integre en el barrio y contribuya a darle vida».
El presupuesto total de la reforma, que se vio obligada a estirar sus plazos por una primera renuncia de la empresaria seleccionada para realizar la obra y «un error administrativo» que retrasó la adjudicación del contrato de gestión, ha ascendido a un millón de euros. La mayor inversión se ha destinado a la «cocina, ventilación y a la adecuación del pavimento, situado en origen a distintas alturas», ha detallado el concejal de Mantenimiento, César Fernández de Landa, quien ha resaltado el aprovechamiento de actuaciones existentes como el aislamiento acústico y las instalaciones vistas.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
