Llodio y Amurrio se hartan de los continuos retrasos en los trenes
A las obras en Orduña y Amurrio que provocan demoras todos los días, se suman accidentes como el de esta mañana, que retrasan más el tráfico
«Todos los días tenemos retrasos. Los trenes llegan tarde, o se suspenden directamente y tenemos que esperar al siguiente». Esta es la queja habitual ... de los usuarios de la línea férrea que une Llodio y Bilbao que, como cientos de personas, usan a diario este medio de transporte. Los retrasos se han convertido en habituales en los últimos meses. «Se deben a las obras que están haciendo» ha asegurado un viajero.
Fuentes de Adif han confirmado que «los trenes tienen que circular más despacio por las zonas en obras y puede producirse alguna demora». Lo cierto es que la estación de Orduña se está ampliando para dar cabida a trenes de mercancías de 750 metros de largo, en Saratxo se está impermeabilizando el puente sobre el río y en Amurrio se construye un nuevo paso subterráneo.
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Desde Renfe añadieron que «en alguna ocasión, han fallado trenes por la falta de personal». Pero según asegura el comité de empresa, esta no es la razón fundamental de las demoras «porque ahora estamos mejor que otras veces». Los trabajadores atribuyen los retrasos «a las obras y la falta de planificación porque el horario de verano ha entrado en vigor con una semana de retraso y la gente ya ha empezado a coger vacaciones», han apuntado.
A eso se suman incidencias como la de esta mañana, provocada por el temmporal, que han mantenido ortada una de las vías de la línea durante gran parte del día entre Miravalles y Llodio. Tras la caída de un árbol en la estación de Bakiola hacia las nueve y media de la mañana, los trenes han tenido que circular alternativamente por una sola vía hasta que la catenaria ha quedado libre de obstáculos a las cuatro y cuarto de la tarde.
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